Según el informe ‘Predicciones de Tecnología, Medios de Comunicación y Telecomunicación 2015’, la venta de dispositivos inalámbricos conectados a Internet superará los mil millones de unidades en 2015, un 60% más que en 2014. Un dato que coloca a la base instalada este año en 2.800 millones de dispositivos. El estudio, elaborado por Deloitte anualmente, analiza las principales novedades del mercado en los próximos 12-18 meses y estudia la evolución que vivirán los medios de Comunicación durante 2015, los principales avances en el campo de la tecnología y la dirección estratégica que seguirá el mercado de las telecomunicaciones.
Según los datos aportados por Deloitte en este estudio, se prevé unos ingresos en los próximos cuatro años de un 500% para esta tecnología y de un 3.000% para el área de analytics que gira en torno a ella. Además, los servicios asociados que podrán prestar estos dispositivos alcanzarán un valor de aproximadamente 70.000 millones de dólares: planes de datos para conectar los dispositivos a una red o servicios profesionales como consultoría, implementación o análisis de datos, entre otros muchos.
Pero, según Enrique Sainz, socio de Deloitte, ‘los consumidores ahora no siempre lideran el cambio’. Y es que el directivo indica que en el caso de las gafas inteligentes, que han copado muchos proyectos que se han paralizado, en el de los drones o el de las impresoras 3D, por ejemplo, sí se ha visto cómo las empresas han invertido dentro de estos segmentos. ‘Las empresas liderarán la próxima revolución tecnológica’, añade Luis Jiménez, socio de la compañía.
Los Millennials, el futuro de la televisión de pago
Según el estudio, los millennials gastarán más de 62.000 millones en contenido multimedia en 2015 en Norteamérica (EE.UU y Canadá) y, casi la mitad de este presupuesto será para la televisión de pago. Una cifra que supera al gasto en publicidad en Internet, que es de 43.000 millones de dólares, y representa una importante contribución a los medios de Comunicación, a pesar de que este colectivo (18-34 años) destina una menor parte de su presupuesto que el de personas con esa edad en el pasado. ‘Los proveedores de contenido deberían considerar ofrecer nuevos servicios que no estén directamente relacionados con la propuesta original de contenidos, como Internet en un concierto o un recinto deportivo’, indica Luis Jiménez.
Asimismo, los datos arrojados en esta predicción indican que en 2015 el consumo de vídeo podría llegar a las 10.000 millones de horas mensuales de vídeo online de corta duración, aunque remarcan que esta cifra equivale a 20 horas del consumo mundial de vídeos de larga duración (programas, películas de TV, etc.). Estos vídeos de larga duración tendrán una cifra de 360.000 millones de horas visualizadas.
Seguiremos informando…