La Asociación de Prensa de Madrid (APM) ha lanzado un duro comunicado contra Podemos pidiendo que cesen una campaña de acoso personal y de hostigamiento contra determinados periodistas críticos con su gestión. La entidad presidida por Victoria Prego (El Independiente y ex El Mundo) ha lanzado duras acusaciones contra el partido que preside Pablo Iglesias indicando que estos profesionales han recibo “llamadas intimidantes” para que rectifiquen sus opiniones o informaciones.
En la nota, la APM indica que han recibido una petición de amparo de un grupo de periodistas que se sienten acosados y presionados por el equipo directivo de Podemos, encabezado por Pablo Iglesias, así como personas próximas a ese círculo. No estamos hablando por tanto de tuiteros aislados o personajes anónimos y militantes del partido, hablamos de líderes y directivos del partido. La organización que representa a unos seis mil profesionales del periodismo dentro de Madrid, ha pedido a Podemos que “deje de una vez por todas la campaña sistematizada de acoso personal y en redes que viene llevando a cabo contra profesionales de distintos medios, a los que amedrenta y amenaza cuando está en desacuerdo con sus informaciones”.
La denuncia ha sido realizada por un grupo de informadores que, según la APM, han aportado pruebas documentales. Estas pruebas indicarían que el acoso de miembros de Podemos “se materializa de manera reiterada y desde hace más de un año en ataques a periodistas en sus propias tribunas, en reproches y alusiones personales en entrevistas, foros y actos públicos, o directamente en Twitter. Estas presiones también se realizan de forma personal y privada con mensajes y llamadas intimidantes”.
La prensa tradicional se hace eco de las denuncias de la APM a Podemos
La APM continúa indicando que esta estrategia “de acoso” de Podemos vulnera de una manera “muy grave” los derechos constitucionales a la libertad de expresión y a la libertad de información y coarta el libre ejercicio del periodismo, “que es imprescindible para preservar la salud de una sociedad democrática como la española”. Estas denuncias no han tardado en abrir informativos y ser publicados en buena parte de los medios tradicionales. De hecho, a primera hora de la mañana era uno de los temas que abrían el programa Espejo Público de Antena 3. Un buen número de políticos, muchos de ellos del Partido Popular, también se han significado a favor de estas denuncias.
Por otro lado, afines a Podemos han calificado a la APM de “sectaria” y de “partidista” por realizar este tipo de comunicados solo en contra del partido de Pablo Iglesias. Han recordado que la Asociación de Prensa de Madrid (APM) no ha realizado comunicaciones respecto de presiones de otros partidos políticos a periodistas y les han recordado casos concretos de ataques de miembros del Partido Popular a determinados profesionales más progresistas. Otros periodistas ya no tan cercanos a Podemos como David Gistau han recordado que las presiones a periodistas por parte de los partidos políticos son algo habitual en la vida informativa española. El debate por tanto está servido: ¿está entrando la APM en el terreno político dando alas a los medios contrarios a Podemos o simplemente defiende los derechos de un grupo de periodistas?
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