Si alguien pensaba que la venta de Zeta a Prensa Ibérica por 30 millones de euros se había cerrado, se equivocaba. Jaume Roures no acepta un no por respuesta y a pesar de las piedras en el camino, va a luchar hasta el último minuto por hacerse con la editora de El Periódico de Catalunya y el diario Sport.
El empresario, que ya controla buena parte del sector audiovisual gracias a Mediapro, quiere adquirir más poder de la mano de la prensa escrita y quiere hacerlo a través de la compra del Zeta. Por eso, no se ha dado por vencido ni se ha acobardado tras la oferta en las últimas horas que Javier Moll ha hecho a la familia Asensio.
El empresario catalán ha subido su oferta 10 millones de euros y está dispuesto a pagar 40 millones para hacerse con la compañía. Este ha sido el movimiento estratégico de Roures para hacer frente a las “interferencias de los poderes fácticos” que, tal y como él mismo ha declarado, están haciendo todo lo posible para que no se convierta en el nuevo dueño de la compañía.
La nueva oferta se ha conocido pocas horas después de que en el sector se diera por cerrada la operación entre la familia Asensio y los Moll por 30 millones de euros y una quita del 70% de la deuda. Según El Confidencial, Roures ha enviado un burofax a las principales entidades bancarias entre las que están el Banco Santander, Sabadell y CaixaBank en el que ha formalizado la puja.
Este mismo diario apunta a que los puntos fuertes de Roures pasan por su solvencia económica frente a la falta de apoyo de la banca, que no querría dar ese poder al empresario catalán, prefiriendo que sea Moll quien lleve las riendas de la nueva Zeta. Por el momento, “las fuerzas oscuras” de las que ha hablado Roures no han logrado impedir dejar fuera de juego al dueño de Mediapro.
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