En la Tierra a lunes, diciembre 23, 2024

‘Al rojo vivo’ vuela sin Javier Ruiz como rival y Mediaset hunde su mañana

Antonio García Ferreras, presentador de 'Al rojo vivo'

La decisión de Mediaset de eliminar Las mañanas de Cuatro de su parrilla revolucionó las mañanas televisivas. Tras el adiós del programa de Javier Ruiz el pasado 14 de junio, el grupo decidió estrenar una nueva tertulia de política en Telecinco solo un día después. La intención de la cadena era recoger la audiencia que se quedó huérfana con la cancelación del debate e intentar establecer un puente entre El programa de Ana Rosa e Informativos Telecinco con el que arrastrar audiencia de un espacio a otro.

El problema reside en que Vasile decidió eliminar su tertulia en uno de sus mejores momentos gracias a los convulsos momentos que se viven en el plano político. En sus últimas cuatro emisiones, el debate anotó 11,8%, 12,3%, 12,5% y 13,3% de share, respectivamente. Pese a que Las mañanas de Cuatro no era capaz de imponerse a Al rojo vivo, que solía imponerse por 1 punto, el espacio se había consolidado como el programa más exitoso y reconocido de la cadena.

Para sustituir a la tertulia, Mediaset optó por recolocar Mujeres y hombres y viceversa en su horario original y lo trasladó a la franja matinal. Este movimiento, que buscaba atrapar al target juvenil con motivo del comienzo de las vacaciones estudiantiles, ha resultado ser un fracaso, rebajando a la mitad sus datos de audiencia con respecto a los cosechados por Las mañanas de Cuatro.

En sus cinco primeras emisiones, MYHYV se ha conformado con un 8,4%, 6,5%, 7,1%, 6,7% y 7,3%, respectivamente. En su primera semana en la nueva ubicación, el programa de Emma García ha promediado un 7,26% de share y ni la aparición de diferentes concursantes de Supervivientes, el formato más potente de la temporada, han logrado revitalizar el programa.

 Al rojo vivo brilla sin Javier Ruiz enfrente

Pero la debacle se hace aún más evidente si se comparan los números con los logrados por Al rojo vivo. La tertulia de Antonio García Ferreras se ha visto impulsada desde el adiós de Javier Ruiz, creciendo varios puntos de un día para otro. Por poner un ejemplo: el lunes 11 de junio, el debate de laSexta logró un 12,8% de cuota de pantalla y 805.000 espectadores, mientras que siete días después, ya sin Javier Ruiz enfrente, Al rojo vivo acumuló un 19,3% de share y 1.146.000 fieles.

El espacio de Atresmedia ha sido el gran beneficiado por la decisión de Mediaset. En su primera semana sin la competencia de Las mañanas de Cuatro, el debate no ha bajado del 16% de share, algo impensable hace unas semanas. Más allá de una subida puntual, la estabilización de estos datos hace pensar que Ferreras ha conseguido atrapar a una gran cantidad del público que antes veía a su principal competidor.

Ya es mediodía, la solución fallida de Telecinco

Cuando tomó la decisión, Mediaset era consciente de la necesidad de tener una tertulia en parrilla, tanto a nivel de audiencias como por la influencia política que supone un espacio de este tipo. Por ello, creó a contrarreloj Ya es mediodía, un nuevo debate para Telecinco con Sonsoles Ónega a la cabeza, que pretendía recoger el espíritu de Las mañanas de Cuatro pero sin la mordiente y la crítica que caracterizaba al espacio fulminado.

En su primera semana de vida, el resultado está siendo más que decepcionante. La tertulia de Ónega ha promediado un 7,4% de cuota y 688.800 espectadores, empeorando los ya de por sí malos resultados que lograba Pasapalabra en familia en esa misma franja. El balance es aún más alarmante si se compara con ‘Al rojo vivo’, que dobla los números del formato de Telecinco pese a que el segundo cuenta con una telonera de altura como Ana Rosa,

En definitiva, la estrategia de Mediaset desmantelando Las mañanas de Cuatro solo puede ser calificada como suicida. La compañía ha conseguido llevar a la total irrelevancia al canal quitándole uno de los pocos formatos que le otorgaban marca propia para sustituirlo por un espacio made in Telecinco. Además, ha conseguido hacer brillar a su máxima competencia y hundir la franja más débil de su cadena estrella. Con la sorprendente cancelación del debate, Mediaset se ha creado un triple problema de la nada, una estrategia insólita hasta la fecha. Habrá que esperar hasta septiembre para saber qué nueva revolución prepara Vasile para arreglar este desaguisado.

Seguiremos Informando…

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