A falta de la gala en la que se elegirá al representante de España en el Festival de Eurovisión 2019, OT 2018 cierra este miércoles sus puertas. El talent pone el broche de oro a esta temporada con un especial navideño en el que, como no podía ser de otra forma, estará Alba Reche, segunda clasificada de esta edición.
Poco después de salir de la Academia, la levantina agradece el apoyo de todos los seguidores del concurso: “Fue una final muy reñida, hemos tenidos mucho apoyo todos y eso lo valoro muchísimo. Fue una sensación de no saber qué pensar. Cuando estás ahí arriba, no sabes qué va a pasar, ni sentía ni padecía, estaba en otro mundo”.
Además, la concursante destaca que le “sorprendió muchísimo el tercer puesto de Natalia, pensaba que iba a ganar después de la puntuación que le dio el jurado”. Acerca de los rumores que le relacionan sentimentalmente con la navarra, Alba es sincera y directa. “Tenemos una bonita amistad. La quiero un montón y se merece todo lo del mundo pero solo hay una bonita amistad”, aclara.
“No sé si me veo en Eurovisión, tengo un pensamiento muy concreto sobre el festival”
A la hora de hacer balance, la intérprete señala, entre risas, que su momento más dulce “fue cuando pudimos cantar todas juntas Somos en la final, aunque solo se oyese a Marta”. Por el contrario, Alba apunta a las expulsiones como el peor momento, ya que, “cada vez que se iban, sentía que no iba a poder compartir esto más con ellos”.
Cuestionada acerca de sus planes fuera de OT, la ilicitana sostiene que su objetivo es “seguir formándome y estar con personas que me inspiren para crear música con calidad”. Con respecto a su futuro disco, Alba explica que, “como mínimo, me gustaría que tuviese ese ámbito artístico del que vengo, tanto a nivel visual como musical, en el que yo pueda aportar cosas”. Además, se marca como reto de cara a ese futuro álbum poder acompañarse en alguna canción por un instrumento.
Alba está entre las favoritas para acudir a Eurovisión con Qué será luego. “Es lo que habéis escuchado, a mí me gusta”, indica, remarcando “el buen trabajo de producción de la maqueta”. Eso sí, la cantante no desprende una excesiva ilusión por acudir al certamen. “Estaría muy contenta de ir pero no sé si me veo, tengo un pensamiento muy concreto de Eurovisión”, asevera, señalando que Famous debe ser el representante de España en el festival: “Para mí, sería un orgullo que una persona racializada como él nos representase, significaría algo mucho más social”.
“Le tengo muchísimo cariño a La llorona, hice click con esa actuación”
OT 2018 se ha caracterizado por su defensa de valores como el feminismo, aunque a gran parte del público le extrañó que el programa intentase mostrarlo a través de Miki y no de una mujer. Tras una gala, Alba y varias concursantes más bromearon acerca de este aspecto, algo que la artista ha querido matizar.
“Quisieron acentuar lo de Miki, que obviamente está súper bien, y no creo que fuese una mala elección por parte del programa. Pero creo que nosotras, a nivel general, el hecho de que se valore de forma negativa un trabajo cuando que lo hace la mujer, porque nos llaman feminazis de mierda y nos comparan con el Holocausto, cuando es a nosotras a lo que nos matan por el mismo acto que está haciendo un hombre, me parece irrespetuoso por la gente que nos critica. Amo a Miki y le agradezco todo el apoyo que nos da”, puntualiza.
Preguntada acerca de cuál era su principal reto al entrar en OT 2018, Alba destaca que ha conseguido no quedarse afónica. “Tenía mucho miedo porque vengo de una disfonía crónica”, admite. Por último, la concursante señala que, a partir de La llorona, todo cambio: “Le tengo muchísimo cariño a esa actuación, hice click”.
Seguiremos Informando…
