MasterChef está más vivo que nunca. La 1 estrenó el pasado martes la séptima edición de la versión de adultos con un espectacular 21% de cuota de pantalla y 2.176.000 espectadores, demostrando que el desgaste no va con este formato. Tras la salida de Eva González, Jordi Cruz es el responsable de poner la voz en off a esta nueva temporada, además de encargarse de las labores de conducción junto a los otros dos jueces.
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Cuestionado por cuál es la clave para que, entre tanto formatos gastronómicos, MasterChef se mantenga como el más visto, el chef compara el programa con un restaurante: “Es la suma de muchas cosas en positivo, ya que hay un equilibrio entre el respeto al oficio, hacer una gran producción, tener el apoyo de todos los cocineros del país y poseer un jurado que entiende lo que es la tele pero también defiende el máximo respeto al producto”.
Una vez más, el casting está lleno de perfiles que pueden dar mucho juego a lo largo de la edición. “Son 15 personas singulares que son personajes pero sin intención de ser mediáticos”, explica Jordi, que asegura que “cada persona se sentirá identificado con uno de ellos”. “Además, nosotros hemos metido toda la caña posible para que los espectadores vean cocina pero también se entretengan”, añade.
Uno de los principales reclamos de esta temporada es que los jueces cocinan más que nunca, lo que alimenta la rivalidad entre ellos. “Yo me hago el picado pero no hay competición, yo voy en Ferrari y ellos en carromato”, bromea Cruz, que subraya que se trata de una competición “sana”. “Mantener ese pique que te motiva y que lo hace divertido es bonito pero, cuando nos reunimos a deliberar, no hay ningún tipo de pique, solo la búsqueda de la excelencia”, asevera.
Sobre la salida de Eva González: “Es una lección de vida”
Con respecto a que sintió cuando le eligieron como responsable de narrar esta séptima edición, Cruz asegura que “podría haber sido cualquier voz pero creo que es interesante que sea una voz que la gente reconozca y que te vaya contando lo que va pasando en la cocina cuando no hay una imagen. Ha sido muy interesante porque locutar no es sencillo y porque es un placer decir ‘dar sabor a la vida’, esa frase que nació en MasterChef y yo voy a hacer que continúe”.
Junto a sus dos compañeros de jurado, Jordi Cruz asume en esta temporada las tareas de conducción del programa. Sobre la salida de Eva González, el cocinero indica que “es una lección de vida, cada uno elige su camino y, en este caso, nosotros hemos aprovechado algo que podría ser malo para hacer una transformación en positivo. Creo que hemos acertado en no querer sustituir y aprovechar lo malo para generar algo bueno”.
Por último, explica que no ha podido ver la nueva aventura televisiva de la andaluza “porque, por desgracia, no veo mucho la televisión. Me gusta ver MasterChef y ver series. Estoy con mi restaurante en Barcelona o en plató, así que hace tiempo que no la veo aunque sé que le va muy bien y que está contenta y con eso me conformo”.
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