Un DESAFÍO para Doña ESPERANZA

Los madrileños no saben si el tema corresponde a la Policía Municipal, a la Nacional, a la Guardia Civil, a la Policía de Tráfico, al Ministerio de Interior, al Ministro de Defensa o a los Bomberos y a los espías del CNI… pero sí saben que Madrid se está transformando en una de las ciudades más inseguras de toda Europa y que “aquí” (en la Capital del Estado) la vida de un ciudadano está en peligro permanente. Antes se decía aquello “De Madrid al cielo”, ahora ya se dice este otro “Sí, de Madrid al cielo pero con dos navajazos en el cuello o dos tiros en la barriga” ¡Y este es el pan nuestro de cada día! Este fin de semana han muerto cuatro personas y han sido asaltados once chalets de las afueras. Los telediarios comienzan a ser una patente de miedo, que cada cual piensa que “mañana puedo ser yo”.

Bueno, pues este es quizás uno de los desafíos más serios que tiene Doña Esperanza, la presidenta de la Comunidad, sobre su mesa. ¿De qué vale resolver el problema de la vivienda, el problema de las listas de espera, el problema de los atascos, el problema de la enseñanza o poner teléfonos de atención al cliente sí lo más sagrado es la vida, tu vida, su vida y la de todos? Doña Esperanza tiene que coger el toro los cuernos y afrontar un problema que está desbordando todos los límites… ¡y si tiene que poner parquímetros (la especialidad de Don Alberto) para detener a los asesinos que los ponga! Es preferible vivir a morir rodeado de Jardines y Parques Naturales.

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