Los que andamos metidos en esto de
Porque entonces los madrileños se echaron a la calle para evitar la remodelación del Museo del Prado, aunque al final y como siempre se hizo lo que mandaba el señor alcalde. “En fachada –que ha ganado en elegancia y armonía arquitectónica, se decía en un periódico del día se han abierto tres puertas, que ponen a la bellísa rotonda baja del Museo en comunicación con la calle. Desde esta entrada natural de
¡Y es que los madrileños llevan siglos protestando todo! Y es que las autoridades llevan siglos haciendo lo que les da la gana. Hoy como ayer y mañana como hoy.
El Valle del Jarama sigue presente
Atocha fue siempre la puerta de Andalucía










