Por su interés, PRFarmacia recoge íntegramente una entrevista a Alberto García, presidente del COFM publicada en Acta Sanitaria.
ENTREVISTA: EN MADRID, HAY FARMACIAS RURALES Y POBLACIONES QUE CARECEN DE ELLAS
Alberto García Romero, Presidente del Colegio de Farmacéuticos de Madrid. Madrid 15/10/2007 El presidente del Colegio de Farmacéuticos de Madrid, Alberto García Romero, acaba de realizar uno de sus periódicos periplos las farmacias rurales de la Comunidad y, frente a las diferencias de éstas con respecto a las urbanas, insiste en lo que comparten ambas, su carácter sanitario y asistencial, aunque de las rurales afirma también que son uno de los paradigmas de servicio público.
Acta Sanitaria. ¿Pero existen farmacias rurales en Madrid?
R. Por supuesto? y nos sentos orgullosos de ello, que significa que la oficina de farmacia está presente en todas las localidades de nuestra Comunidad, con lo que ello representa de servicio asistencial a la población. Estas farmacias son especialmente tantes, que generalmente representan el único profesional sanitario al que pueden acudir de manera permanente los ciudadanos de esas poblaciones. Esa accesibilidad y disponibilidad sanitaria que ofrecen las oficinas de farmacia, tiene su máxa expresión en el medio rural. Piense usted que hay poblaciones en nuestra Comunidad que no tienen ni gasolinera, ni médico, ni colegio? y sin embargo sí tienen una oficina de farmacia velando la salud de los ciudadanos.
A.S. ¿Cuántas hay? ¿Dónde?
R. La Comunidad de Madrid tiene alrededor de 80 localidades ?eminentemente rurales?, algunas de ellas con un reducidíso número de habitantes. La zona norte de Madrid es donde se concentran la mayor parte de ellas, especialmente las más pequeñas.
A.S. ¿Existe algún núcleo poblacional sin farmacia?
R. Sí, todavía queda alguna pequeña localidad sin oficina de farmacia. Le cito algunas, ejemplo, La Acebeda, El Atazar, Mataelpino, etc., hasta un total de 21 localidades, que tienen entre 38 habitantes hasta algo más de 100. No obstante, en estos casos existe un botiquín atendido la oficina de farmacia de la localidad más cercana.
A.S. ¿Qué diferencias presentan respecto a las de la capital?
R. Al margen de otros factores de índole social, como es que tienen que atender a una población más envejecida que en el medio urbano, o que tienen que realizar funciones más características del medio rural como es el servicio farmacéutico veterinario de explotaciones ganaderas, etc, las principales diferencias de las oficinas de farmacia del medio rural respeto al urbano derivan de su relativo aislamiento. Por ejemplo, para ellas es más complicado acceder a cursos de formación, lo que deben apoyarse en tecnologías emergentes, como la formación online a través de Intet. Otro ejemplo son las guardias, que en el medio rural representa en muchas ocasiones un servicio permanente de 24 horas al día los 365 días del año, con lo que ello supone de desgaste personal. Sin embargo a mi me gusta más hablar de semejanzas en lugar de diferencias. Las farmacias del medio rural, comparten con las del medio urbano su carácter sanitario, asistencial y eje con el que se vertebra la salud pública.
A.S. ¿Tienen soluciones sus problemas?
R. Hay soluciones pero necesitan de nuestro esfuerzo y solidaridad. Le repito el tema de las guardias, la formación, la integración en el equipo multidisciplinar, etc. Las soluciones comienzan con la toma de conciencia de la tante labor sanitaria que realizan estas oficinas de farmacia. Confiamos en que las autoridades sanitarias valoren este tante activo, ya que representa el paradigma del servicio público enca de la rentabilidad.
A.S. ¿Qué hace el Colegio para resolver los problemas que advierte en estas oficinas rurales?
R. El Colegio tiene una vocalía específica de Oficinas de Farmacia que trabajan en el medio rural, la que se canalizan las iniciativas, inquietudes y soluciones. Desde el Colegio somos especialmente sensibles con la problemática de estas farmacias, y prueba de ello es que junto con nuestra Vocal de Farmacéuticos Rurales, hemos iniciado una serie de visitas toda la geografía de nuestra Comunidad, donde nos reunos con los farmacéuticos y escuchamos sus demandas. Esta actividad la realizamos de manera sistemática, y como presidente del Colegio me siento especialmente honrado de asistir con otros miembros de la Junta a estos encuentros. Otra iniciativa, ejemplo, ha sido la de incrementar desde 3 hasta 26 cursos la formación online de nuestro Plan de Docencia 2007/2008, con el propósito de beneficiar, entre otros, a los farmacéuticos que tiene dificultades en sus desplazamientos residir en el medio rural. Como gesto de nuestro interés y sensibilidad la farmacia rural, le recuerdo que el año pasado otorgamos la medalla del Colegio, en reconociento a su trayectoria profesional, a dos compañeros que trabajan en el medio rural.
A.S. ¿Es consciente la Administración de tal existencia?
R. Espero que sí, que las farmacias rurales son las que permiten llegar a toda la población muy diseminada que ésta se encuentre. La Administración sabe que una de sus responsabilidades es acercar la sanidad al ciudadano allí donde éste reside, y en este sentido, las oficinas de farmacia son el aliado idóneo su inmediatez, accesibilidad, disponibilidad y calidad del servicio sanitario. Todo ello? el mismo precio.
A.S. ¿Y Bruselas?
R. Bruselas y su dictamen motivado están poniendo en evidencia las ventajas que supone el modelo mediterráneo de farmacia respecto al anglosajón. Quizá con otra concepción, con otro sistema, lo único que se conseguiría sería la congregación de farmacias en las grandes ciudades, desatendiendo el medio rural. Sin duda sería un retroceso tante, que esperemos no se produzca. Cuando conocemos que en centroEuropa hay localidades de más de 700 habitantes sin oficina de farmacia, reforzamos nuestra convicción de que nuestro modelo es mucho más adecuado y acertado, tanto para el Sistema como para los ciudadanos.
