La alteración del sueño repercute directamente sobre la salud y calidad de vida de la persona que lo padece. En la actualidad una de cada cuatro personas sufre algún trastorno de sueño. Mantener hábitos inadecuados a la hora de dormir, el estilo de alentación, las situaciones estresantes, padecer alguna enfermedad, entre otros factores, facilitan la aparición y cronificación de este tipo de trastornos.
Uno de los trastornos del sueño mas frecuente es el Insomnio. Es la dificultad para iniciar o mantener el sueño, o bien la sensación de no haber tenido un sueño reparador durante al menos un mes. La fatiga diurna asociada al insomnio provoca unas consecuencias muy negativas sobre la actividad de la persona que lo padece ya que afecta al rendiento intelectual, laboral, en la atención y concentración, aumenta el sentiento de irritabilidad ante las relaciones con los demás, momentos de somnolencia y cansancio. Todas ellas circunstancias que ponen en riesgo la seguridad para conducir y lo tanto aumenta la probabilidad de accidente de tráfico siendo la causa del 30% de los siniestros en la carretera.
Otro de los trastornos del sueño frecuente es El Trastorno del Ritmo Circadiano. Se refiere a la presencia, de forma persistente o recurrente, de un patrón de sueño alterado o desestructurado que obedece a una mala sincronización entre el ritmo sueñovigilia del individuo, una parte, y las exigencias del entorno en cuanto al espaciamiento y duración del sueño, otra. Dentro de este trastorno encontramos el sueño retrasado. Hay personas que tienden a acostarse y a levantarse tarde, con incapacidad para conciliar el sueño y levantarse a horas mas tempranas pese a desearlo. También el denominado jet lag, que consiste en somnolencia y estado de alerta presentes en momentos del día inadecuados, y que aparece después de repetidos viajes transmeridionales a zonas con diferente huso horario. Hay personas que tienen que cambiar el turno de trabajo, en este caso se produce un insomnio que aparece durante las horas que el individuo debería dormir o somnolencia excesiva durante las horas en que debería estar despierto, debido a un turno de trabajo nocturno o a un cambio repetido del turno de trabajo.
Conducir es una tarea compleja, en la que intervienen muchos procesos físicos, psicológicos y sociales, todos estos procesos se ven afectados cuando se padece un trastorno del sueño lo que es tante que la persona intente resolverlos y evitar no sólo problemas de salud y calidad de vida sino prevenir la accidentalidad en las carreteras.
En todos los casos descritos, y una vez descartado una enfermedad tanto física como mental, estamos hablando de determinados hábitos relacionados con el sueño que tenemos que cambiar para evitar este tipo de trastornos. Afortunadamente el tratamiento psicológico es eficaz para resolver estos problemas. Las técnicas de autocontrol emocional, cómo gestionar las emociones, la ansiedad y el estrés, la relajación, el control de los pensamientos y modificación de creencias a través de la reestructuración cognitiva, cambios en el estilo de vida y estrategias para mejorar la higiene del sueño forman parte de los programas de intervención que se están aplicando en estas personas.
Vicente Prieto Cabras
Psicólogo Especialista en Psicología Clínica
Vocal de la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid.
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