Los grandes periódicos se han despertado de la ‘siesta’ veraniega con la llegada de Bill Clinton a Corea del Norte para ‘negociar’ la liberación de las dos periodistas estadounidenses condenadas a 12 años de trabajos forzados. Los rumores apuntan a que el ex presidente llega con más asuntos a tratar.
Euna Lee, de 36 años, y Laura Ling, de 32, trabajan para Current TV, con sede en San Francisco, y fueron detenidas en la frontera norcoreana con China el pasado 17 de marzo mientras grababan ágenes para un documental sobre el tráfico de mujeres. Un juicio las ha condenado a más de una década de trabajos forzados entrar ilegalmente en Corea del Norte.
Nadie ha hecho caso omiso al aterrizaje del ex presidente americano en Pyongyang y es que, además de para la misión oficial de mediar las dos periodistas, los medios coreanos citados la agencia Yohap de Corea del Sur aseguran que Bill Clinton llevaba un mensaje de parte del mismíso Obama debajo del brazo, algo que el tavoz Robert Gibbs se ha apresurado a desmentir.
Las especulaciones dicen que, aprovechando el viaje, el ex mandatario busca un prer acercamiento para marcar un nuevo rumbo en las deterioradas relaciones entre ambos países. La Casa Blanca asegura que ‘no haremos ningún comentario mientras esté en marcha esta misión‘ y ‘no queremos poner en peligro el éxito‘ de la misma. Sin embargo la prensa norcoreana ha definido la conversación entre Clinton y el líder K Jongil como ‘un amplio abanico de opiniones‘.
