Durante este fin de semana muchos de los principales negocios del país anfitrión de la Copa del Mundo han recibido la prera advertencia de la Federación Internacional de Fútbol: multas superiores a los 1.300 dólares y hasta penas de seis meses de cárcel son los castigos que podrían recibir aquellos individuos y compañías que violen los derechos de propiedad intelectual y la normativa publicitaria acordada la FIFA y las autoridades locales.
Los sponsor de la mayor cita del fútbol: Coca Cola, McDonald’s, Kia, Adidas, Sony, Visa, Budweiser o Castrol, y otra serie de socios sudafricanos como FNB, Telcom o Prasa serán los únicos que tendrán licencia para anunciarse en el estadio, en un radio de dos kilómetros del terreno de juego y en las zonas de fan fest. Ninguna empresa que no sea patrocinadora oficial podrá anunciarse en las principales rutas públicas de las ciudades sede, y en los espacios anteriormente mencionados, a partir de que queden dos semanas para el inicio del Mundial.
Pero los límites no quedan ahí, algunos negocios situados en las ‘zonas calientes’ tendrán que cerrar sus puertas los días de partido y podrían ser cerrados con dos días de antelación. El resto serán estrechamente vigilados para que no vendan productos que compitan directamente con los patrocinadores de la FIFA o que utilicen el nombre de la federación internacional como estrategia publicitaria o como reclamo para sus productos.
Desde prg, y aprovechando el evento de presentación del balón de Adidas para la final de la Champions League, preguntamos a Claus Peter Mayer, Vicepresidente Marketing de Fútbol de Adidas, de qué manera les podía afectar el ambushing del mundial y cómo lo combatirían. Estas fueron sus palabras…
