- Este mes ha nacido la revista Oh My God, propiedad de Martín Mazza y dirigida al público homosexual. Mientras tanto, los ex trabajadores de la extinta publicación Zero tendrán que esperar seis meses para recibir sus indemnizaciones.
En noviembre de 2009 nos sorprendía la noticia de que la revista Zero se veía inmersa en un concurso de acreedores y abocada a la desaparición. Poco después, en enero de 2010 Martín Mazza anunciaba que se haría con la revista, lo que le costó una demanda parte de Zeropress y el editor de la publicación, Miguel Ángel López, atribuirse el nombre y el equipo de Zero. También fueron demandados competencia desleal y vulneración de acuerdos de confidencialidad y exclusividad dos ex trabajadores de Zero, un ex jefe de redacción y un ex auxiliar junior comercial que se fueron al equipo de Mazza.
- La revista Zero demanda a Oh My God y a Martín Mazza
prnoticias pudo hablar entonces con Miguel Ángel López, quien tenía la firme convicción de que el proyecto sobreviviría en la red. No obstante, una vez finalizado el concurso de acreedores a finales de marzo, Zero desapareció definitivamente.
Los 17 ex trabajadores de la revista quedaron entonces sin empleo y tuvieron que comenzar una lucha para conseguir sus indemnizaciones. Según el delegado sindical de Zero, la plantilla demandó a la revista para obtenerlas. Una orden judicial obligó entonces a la publicación a pagar a sus trabajadores. Pero la empresa se declaró en quiebra y los afectados tuvieron que acudir al FOGASA (Fondo de Garantía Salarial) reduciéndose sus indemnizaciones al míno: 20 días año trabajado. A finales de mayo ha comenzado el plazo de seis meses que los trabajadores tendrán que esperar para recibir las cantidades.
Mientras tanto, Martín Mazza estrena la revista Oh My God, heredera del público objetivo de Zero, con una sugerente tada en la que Jae Ostos Junior se desnuda en cuerpo y alma para anunciar su homosexualidad.
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