Hasta el 64 ciento de las personas mayores de 60 años con oclusión venosa de la retina padece hipertensión arterial. En los menores de 50 años el principal factor de riesgo es la hiperlipidemia.
La oclusión venosa de la retina supone una pérdida de agudeza visual entre leve, moderada o grave. La edad avanzada, la hipertensión, la hiperviscosidad sanguínea, padecer trombofilia, la diabetes, etcétera. Son algunos de los factores de riesgo que de no ser controlados aumentan el riesgo de sufrir esta patología.
Con el fin de establecer unas directrices que permitan un correcto diagnóstico y tratamiento de estas patologías, La Sociedad Española de Retina y Vítreo ha editado la Guía de Práctica Clínica para el Manejo de las Oclusiones Venosas de la Retina.










