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No es la prera vez que un caso de corrupción afecta a la maltrecha televisión balear. A principios de 2010, Jacinto Farrús, empresario a cargo de SBT, la empresa concesionaria de los informativos de la cadena, se veía plicado en la Operación Voltor de corrupción. La plantilla de SBT ha sotado el despido de más de medio centenar de trabajadores y el pago de sus salarios. Finalmente esta semana se ha adjudicado la concesión de los informativos a la empresa CBM. El director general de IB3, Pere Terrasa, propuso la contratación directa de entre 25 y 50 trabajadores para los informativos. Aunque no se conoce que se haya tomado tal medida.
A estos problemas se le suma a la televisión balear el de su enorme deuda que asciende a más de 180 millones de euros.
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