Unos 7,5 millones de españoles padecen algún tipo de enfermedad neurológica, lo que equivale al 16% del total de la población, según datos de la Sociedad Española de Neurología. Millón y medio de ellos tienen procesos graves, como ictus o infarto cerebral, demencias, Parkinson, Alzheer, esclerosis múltiple o enfermedad lateral amiatrófica (ELA), que se asocian a tantes discapacidades y originan dependencia de otras personas.
Las enfermedades neurológicas representan el prer motivo en frecuencia de pérdida de la autonomía personal y llegan a constituir casi el 50% de la enfermedad discapacitante. Esto, unido a la creciente demanda de consultas de neurología en general, obliga a una cada vez mayor plicación parte de las administraciones públicas, con el fin de establecer medidas para la atención más adecuada de estos pacientes y de sus familiares más cercanos que se ven afectados. Es un hecho que casi tres millones de españoles están involucrados en el cuidado sólo de enfermos con demencias.
En general, las patologías cerebrales son la principal causa de discapacidad en los mayores de 65 años. Esto significa que seis de cada diez ancianos enca de los 80 años con discapacidad lo son razones neurológicas. La Sociedad Española de Neurología considera que España se encuentra al nivel de los países europeos más desarrollados en cuanto a la atención de los pacientes agudos neurológicos y no tanto en cuanto a los crónicos.
Esta sociedad científica destaca la relevancia del papel del especialista en la prevención, el tratamiento y la planificación de los servicios o unidades a los pacientes discapacitados y dependientes causas neurológicas, así como en programas de promoción para una vejez saludable.
Mayka Sánchez
