‘El País’ y ‘El Mundo’ se suben a la desesperada a la tabla de salvación digital. Las dos principales cabeceras por facturación publicitaria han registrado un pésimo comienzo de curso para sus ingresos de publicidad en papel, los que en parte han sido mitigados por el crecimiento digital. En enero los ingresos publicitarios por internet representaron cerca del 35% de los ingresos totales por este concepto, ganando más de diez puntos porcentuales en un año. El objetivo ahora es superar el 40% antes de que termine el semestre para poder depender menos del agonizante papel.
Enero ha comenzado muy mal para el papel, pero muy bien para los digitales. Como ya habíamos contado en prnoticias los datos del último informe AEDE Deloitte de enero indicaron que la publicidad se desplomó para las ediciones de papel de ‘El País’ (-17%) y ‘El Mundo‘ (-18%), mientras que en sus ediciones digitales el crecimiento fue de 13% y de 2% respectivamente.
En el caso de ‘El País’ los ingresos en papel fueron de 3,2 millones de euros mientras que los de digital fueron de 1,6 millones. Esto significa que el peso digital en enero fue del 34%, casi diez puntos por sobre los datos de hace un año. En ‘El Mundo’ la facturación fue de 2,3 millones y 1,3 millones respectivamente, lo que deja el porcentaje digital en el 36%, también casi diez puntos por sobre el reparto de la tarta total del año pasado.
Las cifras han sido recibidas con cautela en los diarios ya que se producen básicamente por el desplome en papel, pero dan cierto aire de optimismo ya que les permite comenzar a desligarse de la fuerte dependencia que históricamente han tenido de sus ediciones impresas. Por ello, el objetivo es que al menos en este semestre se supere el 40% del peso de la inversión digital en el total de los ingresos publicitarios.
La apuesta digital de los diarios comienza a tener sentido ya que por primera vez los planificadores comienzan ver a sus soportes digitales como la primera opción publicitaria y no como un complemento de la oferta en papel. Incluso los más optimistas creen que este año podría incluso marcar el punto de inflexión para que el digital supere por primera vez en su historia al papel, algo que ya pasa en diarios como ‘Marca’, ‘AS’ o ‘El Economista’.
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