Las cosas siguen muy revueltas en las emisoras de la Cadena SER en el País Vasco. Los cuatro despidos de profesionales históricos acontecidos la pasada semana han hecho saltar todas las alarmas. El nerviosismo se ha instalado en la plantilla y por ello la Comisión de Garantía del Comité Intercentros ha mantenido reunión con representantes de la empresa para pedir explicaciones sobre estas salidas fulminantes y a su juicio injustificadas.
Durante el encuentro los representantes de los trabajadores han exigido que no se produzcan más salidas y han recalcado que todos los despedidos tenían en común ser profesionales mayores de 40 años que acumulaban antigüedad en la principal emisora de Prisa Radio. La empresa ha negado que se vayan a producir más despidos y ha alegado que se trata de un ajuste de plantilla debido a los resultados económicos de los dos centros afectados: SER San Sebastián y SER Vitoria. A nivel global Prisa registró en el primer trimestre resultados positivos en sus cuentas.
Estas las palabras tranquilizadoras de la dirección de la Cadena SER en el País Vasco siguen la línea de las ofrecidas por los dirigentes de Gran Vía 32 a los trabajadores de Radio Madrid el pasado febrero. Por aquel entonces una decena de profesionales también históricos abandonaron la Cadena SER en Madrid lo que llevó al resto de la plantilla a numerosas movilizaciones. Los actos de protesta finalizaron con la llegada de un nuevo director, Vicente Jiménez, que calmó los ánimos con promesas de cese de despidos.
Las movilizaciones llegarán ahora a la SER Euskadi. La plantilla ha convocado para la jornada de mañana 28 de mayo una huelga de 24 horas, una decisión que será apoyada por el resto de emisoras que conforman la red de la Cadena SER en nuestro país. Además, en Radio Madrid se llevará a cabo una huelga de fiermas y protestas delante de los despachos nobles de Gran Vía 32 en solidaridad con el incesante goteo de despidos que llevan sufriendo los trabajadores desde tiempo atrás.
