En el sillón de Elisa Pizarro, afectada por la pobreza energética, se han sentado este domingo Ada Colau, Miguel Sebastián y Jordi Évole. Aunque también Elisa invitó a José Manuel Soria, este decidió hablar desde su despacho, en el que tenía una temperatura mucho más confortable. Así comienza Jordi Évole su denuncia de la grave situación por la que pasan cientos de personas en España, unos cinco millones según la U.E, que no pueden pagar la luz ni el gas.
Elisa tiene clara una cosa, le están asfixiando, a ella y muchos conocidos. También sabe que si no paga una sola factura, en cuatro días le cortan la luz. Sabe además, que no puede encender la calefacción y se las apaña con mantas, y que el congelador de la nevera está mejor apagado. No digamos ya cocinar un plato que requiera tiempo. Así es la situación que tiene Elisa en casa. Ada Colau, la alcaldesa de Barcelona, recuerda a Jordi Évole que en Cataluña, el monopolio de agua, luz y gas ha tenido 5000 millones de beneficio. A base de asfixiarnos, decía Elisa.
¿Y las soluciones? Colau afirma que la respuesta debe ser inmediata, ” No puede ser que se tenga que pagar con dinero público lo que es un mal funcionamiento de un derecho fundamental. Tienen que asumirlo las compañías, no los ayuntamientos”. En su programa, estableció que se harían auditorías y se caminaría hacia la autosuficiencia. Además de crear una empresa pública de electricidad.
El ex ministro de industria, turismo y comercio, Miguel Sebastián explica que cuando propuso la medida del bono social a las eléctricas no les gustó nada ” No les gusta, manifiestan desagrado, a las eléctricas no les preocupa el cliente, les preocupa el contador” Pese a haber recurrido, varias veces, las eléctricas ahora mismo lo están pagando. Colau apunta ” Endesa se amparaba en el bono social para decir ‘ya no tengo que hacer nada más’ y reconocía que no llegaba a quien más lo necesitaba”
Faltó en el sillón de Elisa, José Manuel Soria, que tumbó la medida de “tregua invernal” sin leerse su decreto. Desde su despacho, le asegura a Évole que la pobreza energética es consecuencia del proceso de destrucción de empleo que ha habido en España, además de un problema de pobreza en general. Pero resulta que Elisa cuenta a sus contertulios que aún trabajando, la calefacción en su casa estaba “de adorno”. Soria, no se cree que la pobreza energética haya aumentado en su legislatura un 69%.Vaya por dios.
Elisa, que escuchaba atentamente toda la discusión desde su sillón pedía a Soria “bájense del pedestal”. Porque al final, cuando se fueran sus invitados, seguramente volvería a apagar la luz y a echarse por encima una manta, que también es un derecho básico en su casa.
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