Microsoft y la Agencia Tributaria no han llegado a un acuerdo y, como dicen en las series de abogados, se verán… ¡En los tribunales! Así, estos serán finalmente los encargados de resolver la disputa que existe entre ambas entidades, pública y privada, fruto de los 30 millones de euros, pertenecientes al impuesto de sociedades de varios años atrás, que la multinacional parece no haber pagado. Una deuda que ya venía de atrás, ya que el pasado mes de mayo, se le comunicó que tenía pendientes 11,9, a los que Hacienda les sumó 18,6 millones meses después, lo que suma la cantidad que comentamos.
Microsoft lleva investigada por Hacienda desde 2012
Microsoft Ibérica tiene a Hacienda detrás desde el año 2012, en el cual el ente público inició un proceso de inspección con la intención de analizar las cifras relativas a los impuestos de sociedades de las campañas 2007, 2008 y 2009 de la tecnológica, de los que tenía dudas consistentes. Así, en 2014 y con la investigación terminada, se levantó un acta de regularización en la que se comunicó que la filial española contaba con una cuenta pendiente de 18,4 millones de euros, hecho que esta última reclamó, como era de esperar. Poco después, ya inmersos en 2015, Hacienda regularizó a 18,6 millones.
A esto, hemos de añadir los 11,9 que le reclamaba ya la Agencia Tributaria en el mismo concepto, pero de los años 2004 y 2005. Así, se augura un proceso largo en el tiempo, el cual forma parte del proceso que se está haciendo de cara a luchar contra las malas prácticas fiscales de grandes multinacionales como Microsoft, Apple o Google. De tener que pagar esta cantidad, Microsoft Ibérica sufriría un duro golpe, ya que en su último ejercicio vio cómo se reducían sus ingresos en un 0,7% (166,7 millones es la cifra concreta de ganancias en el pasado año). Por eso, un pago de esta magnitud mermaría las arcas considerablemente.
Irlanda: el paraíso de los impuestos reducidos para Microsoft
Esta deuda que parece tener Microsoft nace de una práctica, cada vez más habitual en el sector, que realiza la tecnológica a través de la cual factura prácticamente todas sus ventas a su filial en Irlanda: Microsoft Ireland. En este país, los impuestos son considerablemente más bajos lo que resulta muy jugoso para las empresas. Así, en contraprestación y en este caso en concreto, les dan una comisión por ventas, marketing y “otros”. Esto se traduce en el año 2014, y en euros, en 116 millones (10% menos que en 2013). Sea como fuere, y con prácticas poco éticas, o no, veremos si finalmente Microsoft se ve obligada a pagar o si el fisco pierde este envite.
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