Cristina Cifuentes sigue en su pugna por el poder del Partido Popular. La “lideresa hippy”, como algunos ya comienzan a denominarla en círculos cerrados, convocaba una reunión esta semana en Génova para relanzar la estrategia de comunicación de los ayuntamientos de la comunidad. Sin embargo, el equipo de Cifuentes no quiso contar con los alcaldes “aguirristas”, que defienden el trabajo que ha llevado a cabo Esperanza Aguirre en los últimos años, algo que la presidenta de la Comunidad y su equipo no quieren mencionar bajo ningún concepto en esta estrategia que tendría como último objetivo allanar el camino a Génova de “la coletas del PP”.
La presidenta de la Comunidad de Madrid y ahora máxima responsable del PP en Madrid tras la salida de Esperanza Aguirre, continúa en su escalada por el poder. La puesta en duda de Mariano Rajoy para liderar el partido han hecho saltar las alarmas y los barones del PP ya parecen estar buscando recambio. Mientras Núñez Feijoo ha decidido dar un paso atrás en la política, en Madrid Cristina Cifuentes está posicionándose como el recambio que el PP necesitaría, una ardua tarea en la que que tendrá que sortear obstáculos que tienen un nombre de mujer: Soraya Sáenz de Santa María.
Desde hace semanas Cristina Cifuentes trabaja intensamente en una campaña de comunicación para relanzar su imagen ante la opinión pública, y como muestra su visita al programa de Pablo motos de Antena 3, El Hormiguero. No es muy común ver a un presidente de una Comunidad Autónoma prodigarse por saraos y medios de comunicación como lo está haciendo Cifuentes sin una elecciones inminentes. Esta campaña de comunicación de la Presidenta de la Comunidad de Madrid también incluye acciones sobre la gestión del PP dentro de la Comunidad y, más concretamente, en los Ayuntamientos. Con este menester el equipo de Cristina Cifuentes citaba este martes a los alcaldes de los municipios gobernados por el PP en la comunidad madrileña. En realidad, no todos los alcaldes del PP en Madrid fueron convocados a esta reunión. Tres ediles quedaron fuera de la convocatoria de Cifuentes. Estos tres alcaldes han mostrado siempre su apoyo acérrimo a Esperanza Aguirre y a los logros de la ex presidenta de la Comunidad en estas tierras. La razón por la que Cifuentes y su equipo no habrían querido contar con estos tres alcaldes parece clara. Y es que dentro de esta estrategia de comunicación no cabría ninguna mención a la citada Aguirre, algo que estos alcaldes aguirristas no comparten. Según este diario ha podido saber, los tres ediles vetados de la reunión fueron Susana Pérez Quislant de Pozuelo, quien había manifestado públicamente en las primeras reuniones en contra de omitir el reconocimiento a la labor de Esperanza Aguirre; Antonio González, alcalde de Boadilla y David Pérez de Alcorcón.
Cifuentes lo tiene complicado para hacerse con el poder en el PP. A pesar de su buena imagen pública, desde dentro del partido, sus aires liberales no terminan de convencer y serán el principal escollo que tendrá que soslayar.
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