Esta semana se hacía oficial que Mediapro y su canal de pago beIN Sports se quedaban con los derechos de la Champions League por tres temporadas más a partir del curso 2018/2019. Una adjudicación que incluye como principal novedad la emisión en exclusiva de toda la competición a través del pago y que supone la desaparición del famoso partido de los martes en abierto. Así las cosas, Jaume Roures vuelve a coger la sartén por el mango y ahora serán de nuevo los operadores los que tengan que negociar con Mediapro si quieren ofrecer en sus plataformas la Champions League desde 2018.
Esto supone volver al escenario que se creó en 2015 con el arranque de la máxima competición continental cuando la compañía liderada por Roures también fue la adjudicataria de estos contenidos, lo que terminó generando un importante conflicto ante la falta de acuerdo entre Mediapro y Movistar+ (principal operador de pago en nuestro país). En esos momentos los primeros afectados fueron los espectadores, puesto que durante la fase de grupos de la Champions League 2015/2016 los partidos sólo se pudieron ver a través de la plataforma de OTT de Mediapro (Total Channel) y en Vodafone TV y Orange TV.
Tanto Vodafone como Orange llegaron a un acuerdo para la emisión de beIN Sports desde el inicio, aunque siempre teniendo en cuenta que su número de abonados es mucho más limitado que el de un gigante como Movistar+. La realidad ponía de manifiesto que el alcance de la Champions League entre la audiencia era muy inferior al de una competición de alto prestigio como la Champions.
Además, tal fue la demanda para ver los primeros partidos de la Champions League que la plataforma Total Channel vivió días críticos con problemas técnicos y caídas del servidor, algo que enfadó a los aficionados españoles que no pudieron ver algunos partidos de sus equipos a pesar de haber pagado por ellos. Tras meses sin llegar a un acuerdo finalmente en enero de 2016 Mediapro y Movistar+ firmaron ‘la paz’ y desde octavos de final la Champions League se incorporó a la plataforma de televisión de pago de Telefónica.
Por aquel entonces fuentes del sector cifraban entre 180 a 200 millones de euros el desembolso que habría realizado Movistar+ por contar con la Champions League desde enero de 2016 y hasta la finalización de la temporada 2017/2018 que comenzará dentro de un mes. Hay que tener en cuenta que esa cantidad se incrementará ahora tras la desaparición del partido en abierto y la oferta en exclusividad de la Champions en el pago.
Es evidente que la Champions League es uno de los principales atractivos de cualquier televisión de pago que se precie. El tirón de la máxima competición continental es innegable y además constituye un referente dentro de la oferta que presentan a sus clientes plataformas como Movistar+, Vodafone TV u Orange TV en el caso de España. Está claro que la Champions no va a ser ni mucho menos barata y que los tres operadores tendrán que volver a realizar un fuerte desembolso económico para incluir en su cartera de canales a beIN Sports hasta 2021.
La ‘nueva’ Champions League a partir de 2018
A partir de la temporada 2018/2019 la Champions League vivirá una serie de cambios significativos, según se confirmaba esta misma semana. La primera es la que os contamos en las líneas superiores y que no es otra que la desaparición del partido en abierto y su emisión en exclusiva en el pago. Desde 2018 los encuentros se seguirán disputando los martes y los miércoles, pero en la fase de clasificación dos choques lo harán a las 19:00 horas y los otros seis a las 21:00 horas.
Por tanto, desaparece el mítico horario de las 20:45 horas. De esta manera, a diferencia de lo que ocurría hasta ahora, nunca coincidirán jugando a la misma hora dos equipos españoles y los espectadores podrán ver los partidos en directo. Solo jugarían dos clubes españoles en el mismo horario en el caso de que cinco equipos españoles estuvieran jugando la fase de grupos. Bienvenidos a la nueva etapa de la Champions League.
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