El tiempo pasa en Cataluña y los equipos de comunicación de los partidos trabajan a contrarreloj para conseguir acuerdos que lleven a sus candidatos a la investidura. La tarea más complicada viene de parte de los independentistas, que con algunos de sus miembros en la cárcel y Puigdemont en Bruselas, la dificultad de las negociaciones se multiplica. Tanto es así que, de momento, la comunicación entre ellos no ha dado frutos, y después de que delegaciones de JxCat y ERC se desplazaran hasta Bruselas para tener una reunión con el líder de los primeros, han regresado a Cataluña sin ningún acuerdo.
Según adelantaba esta mañana Okdiario, el equipo de negociación Junts per Catalunya en Bruselas estaba compuesto por el diputado Eduard Pujol; la jefa de campaña, Elsa Artadi; y el director de Comunicación Jaume Clotet. Además les acompañaban los representantes del PdCat Damià Calvet, Albert Batet y Miquel Àngel Escobar. Allí se han reunido con el jefe de gabinete de ERC, Jordi Bacardit; el ex secretario de Economía Pera Aragonès y el diputado Roger Torrent. A diferencia de JxCat, Esquerra ha decidido no incluir en el equipo a su responsable de Comunicación, Sergi Sabriá protagonista en los últimos días por asegurar en una entrevista en RAC 1 que solo trabajan “con la opción de Puigdemont como presidente”.
Por su parte, el equipo de Inés Arrimadas no pierde el tiempo y ya ha dicho que si los independentistas no se ponen de acuerdo lo intentarían ellos. De momento ya están manos a la obra para intentar configurar una Mesa de la Cámara legislativa que favorezca los intereses de los llamados constitucionalistas, y así presidir el Parlament. Con la mayoría que ostenta el independentismo esto se antoja complicado, pero la jugada con la que cuenta Arrimadas es la de que para el día que se configure la Mesa, el 17 de enero, los independentistas acusen la ausencia de sus ocho parlamentarios (en la cárcel o en Bruselas) y que los 70 escaños conseguidos se queden en 62 para la votación, mientras que Cs, PSC y PP sumarían 62. Aun así siguen siendo minoría, pero su equipo pretende ‘el más difícil todavía’, tratar de negociar con Catalunya En Comú-Podem, con ocho escaños, para que voten al candidato de la formación naranja.
Sin embargo, la comunicación entre el bloque constitucionalista y los comunes, no alineados con ningún sector; no parece que vaya a ser fructífera, tampoco en esta ocasión. Ya en campaña, el mensaje de Xavier Domènech fue claro: no harán presidente ni a Puigdemont ni a Arrimadas. Esto no quiere decir que no vayan a sentarse con las distintas fuerzas políticas, según declaraciones de Marta Ribas recogidas por el diario El País, “pero no votaremos ni a Puigdemont ni a Arrimadas”. Por su parte el PP de Cataluña continúa presionando a los de Arrimadas para que trate de configurar una mayoría seduciendo a los de Domènech, al considerar que deben pasar a la ofensiva en caso de que el independentismo fracase.
Por el momento, la comunicación entre partidos catalanes pasa por un bache, que quedará por ver si es salvable o no. La repetición de las elecciones es algo que todos los partidos rechazan, sin embargo es una posibilidad que, según pasa el tiempo, parece cada vez más real. Por su parte, el portavoz de Esquerra, Sergi Sarbriá, ha apuntado que para descartar completamente la repetición de elecciones es necesario que ERC, JxCat y CUP lleguen a un acuerdo, algo de lo que está convencido que pasará, siempre y cuando Oriol Junqueras sea vicepresident del Parlament.
Oriol Junqueras se la juega en un día clave
El líder de ERC, Oriol Junqueras, acude hoy al Tribunal Supremo para pedir su excarcelación. Si Junqueras sigue en la cárcel es porque el juez Llarena detectó que su puesta en libertad podría provocar acciones violentas. Sin embargo, Junqueras defenderá hoy, por voz de su abogado, Van den Eynde, que su liberación no favorecerá tales episodios violentos, para lo que puede utilizar la retirada del refuerzo policial en Cataluña por parte del Ministerio del Interior, al haberse rebajado la tensión. La decisión de la puesta en libertad quedará en manos de los magistrados Miguel Comenero, Francisco Monterde y Alberto Jorge. Con la salida de Junqueras de la cárcel podría sentarse un precedente para que el resto de encarcelados intente su excarcelación, lo que haría caer la balanza en favor de ERC.
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