La ciudad de Barcelona y sus instituciones no han sabido articular una estrategia de comunicación que frene la caída del turismo en la ciudad. Es lo que se deduce de las palabras de Jordi Clos, presidente de la patronal hotelera de Barcelona. El empresario señaló el pasado jueves cómo la Ciudad Condal ha dejado de aparecer en las listas de posibles ciudades para organizar eventos, y entre otras cosas, culpa al proceso independentista catalán. Según los datos aportados por Clos, los ingresos han caído un 18% el último trimestre.
Desde que el procés comenzó, la incertidumbre por la situación del turismo ha ido en aumento. Según un estudio realizado por Reputation Institute, el deterioro de la imagen de Cataluña afecta a todo el país, lo que implicaría que España pudiera perder hasta 12.000 millones de euros por un descenso del 15,3% de turistas. Unos turistas que, en una grandísima parte, entraban al país por Barcelona. En la misma línea, el 30% de los CEOs europeos consultados por Reputation Institute admiten haber reducido la inversión en España y Cataluña, lo que podría suponer un descenso en la inversión del 1,95%.
Sin embargo, para Jordi Clos, el proceso independentista catalán no es la única causa, sino que más bien se ha debido a “un coctel de circunstancias”. Y es que el turismo español vivió el pasado año 2017 la peor crisis de comunicación jamás vista antes en el sector, siendo la ciudad de Barcelona una de las zonas más afectadas, a pesar (o a consecuencia) de ser Cataluña la comunidad autónoma que más ingresa debido al turismo. Este fenómeno fue para algunos un ejemplo de “turismofobia”, para otros fue, sin embargo, una respuesta a la “turistificación” de los espacios.
Con respecto a la imagen actual de Bacerlona, Clos se quejó de la falta de promoción por parte de la Institución en manos de Ada Colau. Según el presidente de la patronal, el Ayuntamiento de Barcelona “ha hecho cero en promocionar” y aseguró que Colau se comprometió con él en septiembre en invertir en “marca Barcelona”, que según Clos “va a ir a peor” si no se hace nada. A este respecto, Ada Colau anunció hace unos días el lanzamiento de “una campaña de refuerzo del prestigio e imagen internacionales de la capital”, refiriéndose al Mobile World Congress previsto para febrero de este año.
A pesar de todo lo sucedido, el balance del sector ha sido positivo, creciendo en términos generales un 6%. Para Clos no es un mal dato pero recordó que hasta octubre, el sector crecía al 12%. Sin embargo, el empresario no cree que la situación mejore sustancialmente durante 2018 si no hay una implicación global en “devolver la imagen de la ciudad antes de que explotara ese cóctel mediático que tanto la está castigando”.
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