Jon Kortajarena es uno de los modelos españoles más conocidos en la escena internacional pero, en los últimos tiempos, el bilbaíno ha aparcado esta faceta para centrarse en la interpretación. Tras obtener varios papeles en el cine y aparecer en varios capítulos de Quantico, el actor debuta con La verdad en la televisión española y ha concedido una entrevista a prnoticias para hacer balance de la experiencia.
Su personaje en la ficción de Telecinco es Marcos Eguía, “un inspector de Policía de Santander que tiene poca experiencia pero mucha ambición”. Su vida se transforma cuando aparece Paula, interpretada por Elena Rivera, tras varios años desaparecida. “Cuando surge el caso de Paula, ve una oportunidad para demostrar quién es él y lo que puede llegar a hacer. Eso le lleva a usar medios para conseguir la verdad que no son los que debería de utilizar y le lleva a meterse en líos. Mientras la investigación evoluciona, crea una relación con Paula que se acaba desviando”, comenta.
La llegada de la joven revoluciona la vida de Marcos, quien, “con toda su locura, hace de las suyas y pone mi vida patas arriba”. “Yo tengo una novia de toda la vida pero es una relación más de amigos que de pareja y Marcos no se ha dado cuenta”, explica Kortajarena.
Tras una época de sequía en el terreno de la ficción, La verdad es la primera serie que estrena Telecinco en seis meses. El actor cree que atrapará a los espectadores porque es “diferente, inteligente y habla de temas que están de actualidad. Tiene un punto de misterio y oscuridad que a la gente le va a gustar. Es una historia muy cercana a la realidad y es muy sencillo que los espectadores puedan conectar con ella”.
“Era un apuesta arriesgada, solo me vieron en un casting”
Uno de los puntos fuertes de La verdad son sus escenarios naturales, ya que se grabó en Santander, algo que no convencía a Jon en un principio. “Me daba un poco de miedo la idea de ir a Santander a grabar tanto tiempo y estar desconectado de todo lo que conocía pero la experiencia ha acabado siendo un plus. Nos ha permitido concentrarnos más en la historia y conocernos más entre los compañeros, lo cual se nota a la hora de trabajar”, confiesa. Kortajarena piropea a la ciudad cántabra, a la que describe como “maravillosa, tranquila y acogedora. Ha sido un acierto, a pesar del gasto y el riesgo que suponía”.
El propio modelo admite que su elección era un “apuesta arriesgada”. “Solo me vieron en un casting e iba a ser el protagonista. Tenía dudas y me daba miedo pero César Bénitez, el creador de la serie, me dijo ‘Jon, lo que he visto es especial, confía’. Siempre estaré eternamente agradecido a Mediaset y a Plano a plano por esta oportunidad”, asegura.
Con respecto a la respuesta que espera del público, Kortajarena lo tiene claro. “Solo quiero que conecten con la historia y que nos den la oportunidad de vernos, porque si tenemos esa primera oportunidad de tener un contacto bueno con el público, los espectadores se van a enganchar”, finiquita.
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