Tras arrebatarle la mayoría de sus postes para lanzar SER+, PRISA ha anunciado este martes una batería de novedades en la programación de Maxima FM con el objetivo de revitalizar la cadena. La emisora de música electrónica sufrió un duro golpe el pasado 1 de octubre, cuando el grupo despojó a la radio de casi todos sus diales y prácticamente relegó su emisión a Internet y su aplicación.
Para intentar conformar un producto atractivo que vuelva a enganchar a su público potencial, PRISA ha puesto en marcha una serie de cambios en la parrilla de Maxima FM. El más destacado es la reubicación de Mucho max en la tarde, lo que significa que la emisora prescindirá del morning show y cubrirá con radiofórmula esa franja. Además, el espacio también cambia de presentadores, ya que Myriam Rodilla y Jesús Taltavull no continuarán al frente del programa y serán sustituidos por Ramsés López, un histórico de la emisora.
Otro de los espacios que cambiará de franja es Climax, que actualmente ocupaba la madrugada de lunes a viernes y la mañana durante el fin de semana. A partir de ahora, el programa que conduce José M. Duro pasará a emitirse de 14:00 a 16:00 horas, ejerciendo de telonero de Mucho max, que abarcará de 16:00 a 18:00 horas.
A continuación, le tocará el turno a Maxima 51 Chart, que hará doblete ocupando las tardes de lunes a viernes y la mañana del sábado. El show que repasa los principales éxitos actuales de la música electrónica continuará teniendo a Arturo Grao como presentador y su horario será de 18:00 a 20:00 horas. Enric Font, uno de los pocos que mantiene su horario, entretendrá a los oyentes de 20:00 a 21:00 horas de la mano de Máxima reserva. A partir de ese momento, se sucederán las sesiones de DJs como Steve Aoki, Martin Garrix, Don Diablo, Abel Neve o Albert Ramos, que ocuparán toda la noche.
Con estos cambios, PRISA espera que la Maxima FM vuelva a ser el referente radiofónico de la música electrónica. En los últimos tiempos, la audiencia de la emisora ha caído en picado, llegando a perder medio millón de oyentes en cuatro años. El último EGM agudizó esta debacle, ya que certificó que la cadena suma 259.000 fieles, lo que supone una caída del 30% a nivel interanual.
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