La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Oficina en México del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ONU-DH) solicitaron al gobierno mexicano garantizar la seguridad y el derecho al trabajo de los periodistas: Especialmente a los que cubren en primera desde el lugar de los hechos, las caravanas de migrantes en ese país.
Ambas organizaciones por medio de un comunicado pidieron que se garantice a estos profesionales realizar su legítima labor de monitoreo, documentación y comunicación en la llegada de las caravanas en la frontera sur del país centroamericano. Además informaron que han tenido conocimiento de recientes amenazas y actos de hostigamiento. Esto lo han sufrido los periodistas por parte de personal del Instituto Nacional de Migración (INM). Pero no son los únicos agresores ya que también hay implicados varios funcionarios públicos.
En el comunicado tanto la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) como la ONU pidieron a las autoridades garantizar que las políticas de control migratorio sean aplicadas con pleno respeto a los derechos humanos. Esto relacionadas a las personas migrantes y solicitantes de asilo. “Todo ello en línea con los estándares internacionales sobre el uso de la fuerza“.
“A los medios hay que dejarlos hacer su trabajo” señalan en el escrito. Afirmaron que gracias a los medios de comunicación han identificado posibles casos de violaciones de Derechos Humanos cometidos por autoridades de migración. Esto incluyendo a los grupos más vulnerables como mujeres embarazadas y niños, entre otros.
Hasta la fecha México vive una ola migratoria sin precedentes. Una prueba de ello, es que Estados Unidos detuvo el pasado mes de julio en su frontera sur a 212.672 indocumentados. Esta es considerada la cifra más alta durante 20 años.
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