Carlos Quílez (Barcelona 1966), es la cara de los sucesos en el programa Y ahora, Sonsoles que presenta cada día a las 19 horas Sonsoles Ónega en Antena 3. Quílez, todo un referente de la crónica y la literatura negra spañola, ha sido el escogido por la cadena y por la productora Buendía Estudios para acompañar a Ónega en esta aventura, sin duda, la apuesta más ambiciosa y arriesgada de Antena 3 en la presente emporada.
De momento los números avalan las mejores expextativas: Y ahora, Sonsoles lidera su franja horaria con un programa que discurre entre la más estricta actualidad y donde los sucesos adquieren un especial protagonismo de la mano de Quílez. “Por fin un programa que dignifica a las víctimas y que pone el acento en las personas que pagan en su propia piel las consecuencias del delito”.
Así se pronuncia Quílez preguntado sobre qué es lo que más destacaría de esta nueva etapa profesional que ha iniciado en Atresmedia. “En estos más de 30 años de profesión, he puesto la lupa sobre las fuerzas de seguridad. También los delincuentes y en los operadadores judiciales. Sin embargo, nunca hasta ahora había priorizado tanto esa parte indispensable y a menudo olvidada de la crónica negra que es la víctima. Este es el aprendizaje, y desde ese punto de partida, realizo cada día mi sección”.
Para el reputado periodista, reconocido en 2022 con la Gran Placa al Mérito Policial por su trayectoria ciolaborando activamente en la difusión de la actividad del Cuerpo Nacional de Policía… “ponerse en la piel de la víctima supone un ejercicio de humildad y de empatía que probablemente deberíamos de aplicar mucho más en todos los aspectos de la vida”.
Quílez se incorpora al proyecto de Sonsoles después de 30 años de periodismo “de la mala vida” como a él le gusta decir, en la Cadena SER, Onda Cero, Crónica Global, RAC1, TV3, y en los últimos años, al frente del diaro digital Eltaquigrafo.com, y sobre todo, como experto de seguridad de laSexta TV.
Y ahora Sonsoles, con casi 1.500.000 espectadores diarios, está marcando tendencia en las tardes televisivas españolas. Uno de los elementos en los que se sustenta ese liderazgo es la aportación de Quílez. “Nuestro objetivo es aportar en la sección de actualidad información exclusiva, o en su caso, una mirada diferente sobre el suceso o el conflicto social en cuestión”.
Para ello, el programa dispone de un equipo de reporteros de primer nivel que diariamente demuestra su capacidad para mimetizarse en el caso del que han de informar. “Efectivamente es un trabajo de equipo. Llevo muchos años en este oficio y no me equivoco si afirmo que los componentes de Y ahora, Sonsoles, rezuma un extraordinario talento. Con todo, sin embargo, lo que más que ha impactado y más me está seduciendo de esta nueva etapa es la ilusión que describe el brillo en los ojos de mis compañeros y compañeras. Talento e ilusión nos harán imparables. Seguro”.
Quílez comparte mesa durante los minutos más negros y criminales del programa con la presentadora. “Un día, al poco de incorporarme llamé jefa a Sonsoles. Ella seria y tajante me dijo que no la llamara así, que ella no era “una jefa”, sino una compañera. Y no mintió. Una compañera más que, eso sí, lleva sobre su espalda la responsabilidad y dificultad de conducir un programa diario de estas características. Sonsoles es una estrella a la que te puedes acercar, la puedes tocar, puedes compartir con ella no solo información, sino también cómo ésta te afecta”.
Quílez dio el salto a Madrid desde Barcelona seducido “fundamentalmente por el proyecto. Y ahora, Sonsoles está demostrando que se puede tratar la actualidad incluso el conflicto o la denuncia social, desde el rigor, la empatía y la sencillez. Para mí ese tono es fundamental, es el estilo que me gusta y que me enseñaron durante los más de 20 años de trabajo en los servicios informativos de la Cadena SER, sin duda mi gran escuela”.
Carlos Quílez compatibiliza trabajo periodístico con el literario, pero insiste en que “soy ante todo periodista. De hecho, mi obra literaria está basada en la Non Fiction. Si todo va bien este año publicaré un nuevo libro al que me gustaría llamar “Condenados Relatos”, historias de criminales y policías que he conocido en primera persona, con material inédito y con el que pretendo cerrar la trilogía que empecé hace 15 años con el libro Mala Vida”.
El conocido periodista no solo tiene ese proyecto en marcha. También se plantea otros y ambiciosos retos: “Desde hace meses estoy con mi equipo trabajando en un proyecto de programa semanal sobre crímenes y criminales. Me apetece mucho la idea de conducir un programa que muestre el crimen sin artificios ni maquillaje que es como yo lo he conocido”
“Dicen que el buen periodista es el que vale más por lo que calla que por lo que explica. Aunque últimamente, he de reconocer que me están entrando muchas ganas de explicarlo todo. Veremos” concluye con una sonrisa, quien a sus 56 años dice seguir emocionándose cuando un policía, un guardia civil, un mosso, un juez o un confidente le despierta de madrugada con una exclusiva. Con la misma ilusión con la que a los 18 años montó la radio pirata y el primer semanario de su pueblo (Montcada i Reixac) concluye… “aún no he dado mi mejor noticia”.
Seguiremos Informando…