Durante los últimos días ha trascendido en los medios de comunicación mexicanos el debut de una nueva presentadora de noticias en las plataformas del conglomerado de medios mexicano Grupo Fórmula.
Su nombre es NAT, fue presentada como “la primera presentadora de noticias creada con Inteligencia Artificial (IA) en Latinoamérica” y apareció por primera vez el pasado viernes 18 de marzo, en el sitio web, las redes sociales, las emisoras de radio y el canal de TV del grupo.
Desde Grupo Fórmula, toman la noticia con naturalidad y señalan que la Inteligencia Artificial ya es parte de nuestros días. Indican que la presentadora virtual tiene la misión de generar contenido para el público.
Oswaldo Aguilar, Content Acquisition & Distribution Manager for OTT’s de Grupo Fórmula, explicó en una entrevista publicada en el sitio web del grupo, que el nombre de la presentadora virtual viene de N.A.T. (Tecnología de Inteligencia Artificial Neuronal, por sus siglas en inglés Neural AI Technology).
NAT se enfrenta a su primera entrevista
El periodista Joaquín López-Dóriga, presentador de Grupo Fórmula, fue el encargado de realizar la primera entrevista al “nuevo fichaje” del medio. El periodista no disimuló al manifestar su asombro, como se muestra en un vídeo difundido por la cuenta de Twitter del grupo.
Refirió López-Dóriga que a lo largo de sus 55 años ejerciendo como reportero, ha entrevistado a Papas, reyes, líderes de todo el mundo, y hasta delincuentes, pero que entrevistar a una presentadora virtual, era algo completamente nuevo para él.
El periodista menciona que tanto él como el resto del equipo de reporteros del canal, salen a buscar la información para poder construir las noticias, en tal sentido, preguntó a la presentadora virtual: Y tú, ¿De dónde vas a sacar la información?
“Mi programación utiliza una combinación de tecnologías avanzadas en procesamiento del lenguaje natural y aprendizaje automático para recopilar información de diversas fuentes, como agencias de noticias, periódicos, sitios web y redes sociales”, explicó NAT.
Ante esto, es difícil no preguntarse hasta qué punto la irrupción de la IA pudiera afectar el empleo de los periodistas. Aunque ya existen varias investigaciones que abordan el tema de manera general, es demasiado pronto para sacar conclusiones definitivas.
¿Cómo repercutirá la IA en el empleo?
De acuerdo con un informe publicado recientemente por la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), titulado: La transformación del trabajo y el empleo en la era de la Inteligencia Artificial, análisis, ejemplos e interrogantes, tras una recopilación de múltiples estudios relacionados con el impacto de la IA, no se alcanza un consenso muy claro sobre las repercusiones de esta tecnología en el empleo, los salarios o las categorías socioprofesionales.
No obstante, explica el estudio que la mayoría de las investigaciones se han hecho desde un enfoque basado en la hipótesis de que la IA probablemente automatizará algunas de las tareas que componen una profesión, pero no todas.
“Aunque las estimaciones de la mayoría de las investigaciones apuntan a que la IA afectará a todas las categorías profesionales, ya sean de baja, media o alta cualificación, algunas categorías se verán más amenazadas que otras”, se detalla en el documento.
Las competencias y el riesgo de la automatización
La investigación publicada por la CEPAL indica que según lo que se refleja en diferentes estudios analizados, los empleos poco o nada cualificados, que no requieren titulación profesional, serán los más expuestos al riesgo de la automatización.
Sin embargo, aquellas profesiones que requieran de competencias como la capacidad de resolver problemas complejos, negociar, influir, ser creativos o cuidar de los demás, estarán menos expuestas al riesgo de automatización. “Así, las profesiones vinculadas a la salud, la educación, la investigación, la comunicación o las artes serían las menos amenazadas”, señala el documento.
Como conclusión final, la investigación publicada por la CEPAL alerta sobre la responsabilidad de empresas, gobiernos y sociedad en general para afrontar los cambios que supone la irrupción de la IA.
“La cuestión más importante no es tanto saber cuántos trabajos puede destruir la IA en el futuro, sino saber qué tipo de sociedad queremos promover realmente de cara al futuro. Nuestra relación con la tecnología y nuestra visión de cómo debe ser la sociedad determinarán en gran medida el futuro del trabajo”, concluye.
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