Vivimos un cambio de paradigma en el que ya no son las empresas las que eligen a las personas, sino las personas las que eligen a las empresas, y la industria turística de México, no está exenta de ello.
Actualmente, el turismo Mexicano experimenta una alta rotación de personal y los datos aportados desde la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles de León, nos ofrecen un ejemplo de la situación.
El sector presenta una rotación de un 30%, especialmente del personal más joven, de acuerdo con las cifras aportadas por el presidente de la asociación, Eduardo Bujaidar, entrevistado recientemente por el diario El Sol de León. Bujaidair aseguró que los nuevos empleados, más jóvenes, “entran a las vacantes y sólo duran 3, 4 o máximo seis meses en los empleos y luego los abandonan”, dijo.
El Efecto de la generación Z
La generación Z está conformada por aquellas personas que nacieron entre mediados de la década de los años 90 y 2000 y, de acuerdo con el estudio publicado en diciembre por LLYC “El efecto Z”, esta generación revolucionará la forma en la que se concibe el trabajo, generando un “efecto contagio que ya están teniendo y tendrán, todavía más, sus hábitos, sus prioridades y sus formas de concebir el trabajo en el resto de las generaciones”, destaca el informe.
Asimismo, el estudio asegura que 2023 volverá a ser un año en el que los departamentos de Recursos Humanos seguirán adaptándose a un cambio en la relación talento-empresa. En tal sentido, cita los datos de una investigación realizada por LinkedIn, en la que se confirma que los sectores tecnológico, del entretenimiento, la hostelería y el retail, serán los que sufrirán las mayores tasas de rotación.
A todos los cambios, se adiciona el impulso a la digitalización que supuso la pandemia, que puso en el centro del debate conceptos como el de flexibilidad. Por su parte, la salud mental, la conciliación, la ética o la sostenibilidad, se cuelan en las prioridades de unos profesionales que, definitivamente, han cambiado. Ante el trabajo se comportan cada vez más de la misma manera en que lo hacen como consumidores, clientes o ciudadanos.
¿Cómo frenar la rotación de personal?
Desde LLYC, explican que, ante la importante aceleración de la industria turística mexicana en comparación con años prepandémicos y pandémicos, hoy más que nunca las empresas del sector necesitan resolver diversas interrogantes, entre las que destacan ¿cómo atraer y captar los perfiles que necesitan?, ¿cómo mejorar el compromiso del equipo para enfrentar los desafíos de la organización?, ¿cómo frenar la rotación que no para de crecer y que está afectando directamente los balances económicos?, entre otras.
Muchas de esas cuestiones han traspasado las fronteras de los departamentos de RR. HH., que se ven orientados a reformular y adaptar la forma en la que enfrentan estos desafíos. Según el área de Deep Learning de LLYC, durante el periodo 2019-2022, las menciones a retos como la “retención del talento” y la “capacitación de talento”, crecieron en la conversación en Iberoamérica el 35% y 71%, respectivamente.
Por tanto, son tiempos de innovación, de reformular lo que se hace e incorporar a los equipos de RR. HH. nuevas capacidades, similares a las de marketing, para poder abordar los desafíos que depara el futuro.
Claves para enfrentar los desafíos
Mauricio Carrandi, director general de LLYC México explica que lo más importante que debe tomar en cuenta una empresa para enfrentarse al desafío de atraer y fidelizar el talento, es ponerlo en el centro, de la misma manera que se hace con los clientes, cuando hablamos desde la perspectiva del marketing.
“Hoy las empresas de cualquier industria o sector, y la industria turística no es la excepción, deben poner a los colaboradores en el centro de la estrategia y de las decisiones de negocio. El no tener estas conexiones con el talento de la compañía, puede causar problemas serios para la sostenibilidad de las compañías en el medio plazo”, explica Carrandi.
Entre las claves para enfrentar los desafíos, enumera las siguientes:
-Transformar la visión corporate centric en una visión people centric que permita comprender mejor al talento: cuáles son sus necesidades y preocupaciones
-Conectar ese entendimiento profundo con las particularidades como organización, para crear un relato diferenciador. Se trata de crear una marca propia como lugar para trabajar con la misma solidez que se construye la marca producto.
-Redefinir, a partir de ese conocimiento, una nueva relación con los potenciales candidatos y profesionales.
“Son tiempos para reflexionar e incorporar nuevas capacidades dentro de los equipos, con el fin de poder abordar los desafíos que nos depara el futuro. 2023 será, por tanto, el momento de hacer de la necesidad virtud y empezar a aprovechar las ventajas que puede tener el cambio”, apunta el equipo de LLYC en su informe “El efecto Z”.
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