El pasado viernes 30 de junio cerró la emisora venezolana Radio Caracas Radio (RCR), la radio comercial más antigua de Venezuela y una de las más antiguas de América Latina, su fundación se remonta a 1930. Tras reinventarse y luchar por mantener viva la emisora durante un tiempo, finalmente la directiva de RCR decidió echar el cierre , una medida que fue tomada debido a las dificultades que atraviesan los medios de comunicación independientes en ese país y, principalmente, para preservar la integridad de los trabajadores y los activos del medio de comunicación.
Así lo explicó el director general de la emisora, Jaime Nestares, en una entrevista que le realizamos desde PRNoticias. Recordó que RCR es la empresa madre de la corporación de medios Grupo 1BC, entre los que destaca el canal de TV Radio Caracas Televisión (RCTV), cerrado en diciembre de 2006 por orden del presidente Hugo Chávez.
“El Gobierno violó todos los derechos de RCR para permanecer en el aire”
Para entrar en contexto, Nestares enumeró los antecedentes que preceden al reciente cierre de las transmisiones vía YouTube que realizaba la emisora RCR para poder continuar al aire e informar a la colectividad:
-El 27 de diciembre de 2006, el presidente Chávez ordenó el cierre de la señal en abierto de RCTV.
-En abril en abril salieron con RCTV internacional y la cerraron en enero 2010.
-El 26 de agosto de 2017 se ejecutó el cierre de la emisora FM 92.9 FM, que era de corte juvenil y servía de apoyo y desarrollo de la empresa.
-El 30 de abril de 2019 cierran la emisora RCR, alegando que se había vencido la concesión de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL). “Lo cual no es cierto. El 30 de abril fuimos invadidos militarmente, tomaron la sede transmisión y nos comunicaron que cesaba nuestra actividad por no renovación”, señaló Nestares y añadió que fueron volados los derechos de la emisora de estar en el aire.
“El Gobierno violó todos los derechos de RCR para permanecer en el aire, nuestro título nunca fue transformado, por tanto, no estaba vencido, tenían que haberlo transformado hasta el 2027 y no lo hicieron. No es que nuestra concesión se terminó es que nos cerraron. Punto… Arbitrariamente”, aseguró.
De hecho, añadió que tanto a RCR como sucedió con la televisora RCTV nunca le convalidaron sus títulos sobre la concesión ni se los trasformaron con la ley de telecomunicaciones. “De manera que ya estamos en el mismo caso de RCTV, que ya lo sentenció la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), como una violación integral a todo el derecho de telecomunicaciones en Venezuela y obligaba al Estado venezolano a devolver las concesiones y las plantas de transmisión a RCTV, cosa que el gobierno decidió desobedecer”, aseveró.
Se reinventaron para sobrevivir, pero la situación se tornó insostenible
Nestares comentó que tras el cierre de la radio el 30 de abril de 2019, trataron de construir una alternativa innovadora, bajo el concepto de “la radio que se ve” y, con unas cámaras en el estudio, comenzaron a transmitir programas a través de YouTube. “La verdad es que nos iba muy bien y tuvimos una gran esperanza de que el canal pudiera económicamente mantenernos y ser una fuente de ingresos importante”, dijo.
Sin embargo, decidieron cerrar, debido a las múltiples dificultades que enfrentaron en los últimos cuatro años: además de las consecuencias de la pandemia, han sufrido limitaciones en el suministro de los tres servicios necesarios para funcionar de forma optima: electricidad, internet y telefonía fija por cable de cobre.
Explicó que la inestabilidad del servicio de internet resulta vital cuando se trata de una transmisión vía YouTube, dado que, al interrumpirse, expulsa a los oyentes de la transmisión en directo. “Teníamos programas con 4 mil y 5 mil seguidores y a lo largo del día terminaba con 40 o 47… el nivel de interrupciones era absolutamente insoportable”, lamenta Nestares.
Por otra parte, mencionó el corte de las líneas de telefonía fija que les afectó enormemente, pues RCR se caracterizaba por recibir denuncias de su audiencia y, para ello, tenían cerca de 55 líneas de teléfono abiertas a través de telefonía por cobre tradicional, que funcionaban a través de las empresas telefónicas estatales Cantv y Movilnet. “Estando al día de nuestros pagos, nos cortaron 25 líneas de teléfono de CANTV. Con esto, se detiene la relación de la audiencia con la radio”.
Aun cuando existe la telefonía móvil, Nestares explicó que a través de este tipo de telefonía, a diferencia de la que va por cable de cobre, si en el interior de la república hay falla eléctrica, no hay comunicación.
En relación con la electricidad, indicó que la radio estuvo 92 días consecutivos sin el suministro de este servicio, sin embargo gracias al funcionamiento de una planta eléctrica propia pudieron enfrentarlo.
Además, a todo este complicado cuadro, se le suma el deterioro económico de los anunciantes, pues en Venezuela, la industria publicitaria está en una lamentable situación.
“Si tu unes las dificultades eléctricas, las dificultades de comunicación, de internet, de mercado y las dificultades propias de la ciudadanía… la verdad que el panorama es un poco complicado”, señala.
Agregó que a toda esa situación se le añade que, en el último año, en Venezuela se cerraron más de 230 emisoras de radio “y las últimas no de una forma muy amable, y se han cerrado entre 14 y 20 medios digitales”. Asimismo, advirtió que en el interior del país se han llevado o han malogrado equipos de transmisión de las emisoras y también se han llevado a personas detenidas. “El sistema totalitario a través del miedo, la amenaza, la dádiva, los regalos, los pagos, los sobornos, ha hecho de los medios de comunicación un infierno”, asegura.
No es un adiós sino un hasta luego
Como explicó Nestares, desde RCR intentaron, por todos los medios, seguir al aire, pero las dificultades eran enormes, aunadas al riesgo político: “Estamos recibiendo señales del gobierno de que volvemos a ser `sumamente incómodos´. El cierre o la cancelación sin ningún tipo de explicación de las líneas telefónicas es una señal lo suficientemente potente como para entender que, dadas las dificultades, parece responsable preservar a la gente y a los activos antes de que vayamos a mayores, mientras encontramos una manera más eficaz, más eficiente y menos arriesgada de poder llegar a la gente”, aseguró.
Nestares indicó que los activos de la emisora se encuentran doblemente amenazados, por una parte, ante el peligro de confiscación o destrucción –como explicó que ha sucedido con otras emisoras en el interior del país- y, por otra, debido a que las fallas en el suministro eléctrico e internet.
“Es inexplicable para España que tú le puedas decir que por la red eléctrica venezolana cuando cae un rayo entra un pico que te quema los equipos… nosotros tuvimos que desconectar los cables de uno de nuestros transmisores para no recibir los chispazos que estábamos recibiendo”, expresó.
En tal sentido, comenta que están trabajando en encontrar maneras más eficaces de poder llegar a la gente, a la vez que preservan tanto los activos de la empresa como la integridad de su personal. “Mantenemos nuestros activos, nuestros transmisores, y a nuestra gente, para poder volver al aire en el momento en que sea posible, con plenitud muscular. Sería poco ético someterlos a un riesgo con los resultados que estamos obteniendo de audiencia, someterlos a un esfuerzo cuando estamos enormemente limitados”, asegura.
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