A tres semanas de que la baliza V-16 conectada pase a ser obligatoria en España, el debate sobre seguridad vial se ha trasladado de la mera compra del dispositivo a cuestiones de fondo: cómo se legisla, cómo se informa al ciudadano y qué papel juegan los fabricantes responsables en este nuevo escenario. El sector de la iluminación y de los sistemas de señalización de emergencia pide un marco normativo claro, estable y técnicamente exigente, que no solo imponga dispositivos conectados a la DGT 3.0, sino que también combata la banalización de los productos no homologados y refuerce la formación de todo el canal, desde talleres y distribuidores hasta el conductor final.
A día de hoy, el 65% de los conductores españoles desconoce los detalles de la nueva normativa sobre este dispositivo, un dato alarmante que revela un amplio desconocimiento. Lo confirma un estudio de OSRAM, líder mundial en iluminación para automóviles. Otro dato que arroja es que casi el 40% de los automovilistas españoles no tienen claro el impacto que tendrá el cambio de normativa en la seguridad vial.
En este contexto, cobra especial interés la visión de Carlos Garrido, Sales Manager en OSRAM. En esta entrevista a PRNoticias, se aborda qué reclama la industria al legislador para que la obligatoriedad de la V-16 conectada se traduzca realmente en menos víctimas en carretera, y otros datos de interés para que los conductores puedan diferenciar claramente una baliza V-16 conectada y certificada de una que no lo está.
¿Qué le está pidiendo hoy el sector de la iluminación y la seguridad vial al legislador para facilitar la transición hacia las luces V16 conectadas?
Sobre todo, como desarrolladores, nos gustaría ver una mayor comunicación directa al conductor, ya que es clave para que los usuarios adquieran la conciencia de este nuevo elemento de seguridad.
¿Considera que la DGT ha hecho lo suficiente en términos de difusión y educación sobre la nueva normativa?
Nuestra labor no es la de juzgar la estrategia de difusión de la DGT, sino la de aportar nuestro granito de arena para generar la máxima visibilidad sobre la normativa y todo lo relativo al producto y dudas que puedan surgir a los usuarios. Por eso, en OSRAM estamos impulsando campañas de concienciación y colaborando con distribuidores, talleres y medios especializados para que los conductores comprendan qué exige la nueva normativa y cómo elegir una baliza V16 conectada y certificada con total garantía. Creemos firmemente que, como marca líder, tenemos la obligación de informar.
¿Qué aspectos de la legislación actual sobre las luces V16 considera que generan más confusión entre los ciudadanos y qué cambios normativos serían deseables a corto plazo?
“Más que confusión, lo que detectamos entre los conductores españoles es una clara falta de conocimiento sobre la nueva normativa de señalización de emergencias. Nuestro estudio revela que el 65% de los conductores desconoce los detalles de la normativa V16 y que más del 30% no sabe que circular sin una luz homologada podrá acarrear sanciones a partir de 2026. Además, el 23% de los encuestados no sabe diferenciar una baliza certificada y legal de una que dejará de serlo el 1 de enero de 2026, lo que pone de manifiesto la necesidad de seguir informando y educando al consumidor”. Esta falta de conocimiento se debe, en buena medida, a que todavía conviven en el mercado distintos tipos de dispositivos (luces V16 conectadas y no conectadas, además de los triángulos tradicionales), lo que genera incertidumbre a la hora de elegir el producto correcto. Sobre todo, creemos que será clave el control que se haga en las estaciones de ITV, así como por parte de las autoridades, de que los dispositivos que haya en el mercado sean los legalmente permitidos.
¿Existe algún riesgo de que se retrase la aplicación efectiva de la normativa debido al alto desconocimiento ciudadano?
La DGT ha dejado claro en numerosas ocasiones que la normativa entrará en vigor a partir del próximo 1 de enero de 2026, por lo que, a priori, no hay motivos para pensar que se retrase su aplicación. No obstante, es cierto que el alto desconocimiento por parte de los ciudadanos sobre esta normativa es un factor a tener muy en cuenta. A eso se une, además, un dato muy preocupante: según nuestro estudio “Conocimiento, actitudes y comportamiento de compra de los conductores españoles con relación a la nueva luz de emergencia conectada V16 obligatoria”, a poco más de 2 meses para el inicio efectivo de la nueva normativa, sólo un 8% dispone ya de una luz V16 conectada. Esto demuestra que aún hay mucho trabajo por hacer en materia de comunicación y concienciación, una tarea que desde Osram nos tomamos muy en serio.
Desde OSRAM, ¿cómo se está colaborando con las autoridades para asegurar que los dispositivos en el mercado cumplen con los estándares exigidos por la DGT 3.0?
En OSRAM colaboramos estrechamente con las autoridades y organismos de certificación para garantizar que todos los dispositivos que llegan al mercado cumplen con los requisitos técnicos definidos por la DGT 3.0. Participamos desde el inicio del proyecto en los grupos de trabajo organizados por DGT que han establecido los criterios de homologación y realizamos ensayos exhaustivos de conectividad, visibilidad y resistencia. Además, trabajamos junto a distribuidores y operadores tecnológicos para asegurar la trazabilidad y autenticidad de cada unidad vendida. Nuestra LEDguardian ROAD FLARE Signal V16 IoT, por ejemplo, está totalmente certificada y conectada, reflejando nuestro compromiso con una movilidad más segura y fiable en las carreteras españolas.
¿Qué mecanismos de control o certificación existen actualmente para evitar que productos no homologados lleguen al consumidor?
Actualmente el mecanismo principal es el laboratorio certificador, que emite un documento que verifica la idoneidad del producto y puede ser visualizado a través de la Web de DGT. No obstante, existe al año de obtener este certificado, una inspección de la UCA que se debe realizar en la fábrica de origen. Dicha información creemos que es muy relevante, ya que permite confirmar que el producto se sigue fabricando de acuerdo con los estándares.
¿Cómo puede un ciudadano diferenciar claramente una baliza V16 conectada y certificada de una que no lo está?
La clave está en tres elementos: Marcado DGT 3.0 visible en el producto o embalaje; Número de serie o identificador único; Presencia en la lista oficial de la DGT disponible en su web. Si un dispositivo no cumple alguno de estos puntos, no debe considerarse válido. Nuestra LEDguardian ROAD FLARE Signal V16 IoT, por ejemplo, está homologada y figura en esa lista, garantizando plena conformidad.
¿Qué consecuencias legales y de seguridad tendrá para un conductor circular sin una luz V16 conectada a partir del 1 de enero de 2026?
A partir del 1 de enero de 2026, los triángulos y las luces no conectadas dejarán de ser válidos. Circular sin una V16 conectada y certificada podrá acarrear sanciones de hasta 200 euros. Pero, más allá de la multa, el mayor riesgo es para la seguridad del conductor. Las V16 conectadas permiten señalizar el vehículo sin salir del habitáculo y enviar automáticamente la ubicación a la DGT 3.0, alertando a otros usuarios y reduciendo drásticamente el riesgo de atropello. Esta tecnología, como la que ofrece OSRAM, representa un salto cualitativo en la prevención de accidentes y en la protección de la vida en carretera.
Seguiremos Informando…










