La semana pasada hablábamos en prnoticias del preocupante incremento del uso de bloqueadores de publicidad que se ha producido en el último año. Esta tendencia ha hecho que anunciantes y medios busquen vías alternativas para evitar que los consumidores rechacen los spots. Maylis Chevalier, de Ligatus, ha analizado hoy en el seminario de IAB qué influencia tienen estos bloqueadores, por qué ha aumentado su utilización y cómo se puede luchar contra ellos. Según Chevalier, el uso de los bloqueadores podría costar 41.000 millones de dólares en 2016, lo que supone el 21% total del volumen de publicidad. ‘Está claro que esto es una frustración para el sector. Hay un problema’, ha afirmado.
La ponente ha señalado que 2.000 millones de usuarios utilizan bloqueadores de anuncios al mes y que la tendencia es al alza, algo que preocupa cada vez más a los anunciantes. El perfil de los consumidores que rechazan la publicidad es claro: el 40% tiene entre 18 y 29 años y el 23% entre 30 y 34 años. En nuestro país, el 15% de los internautas ya bloquea los anuncios online.
En este punto, Chevalier ha llamado la atención sobre el hecho de que al mismo tiempo que se incrementa la inversión en publicidad online se incremente el uso de los bloqueadores, algo que amenaza a la rentabilidad del dinero que se destina a anuncios.
¿Por qué utilizan los bloqueadores?
Pero, ¿por qué utilizan bloqueadores los usuarios? La country manager de Ligatus ha apuntado que en parte este incremento del uso de los bloqueadores ha venido provocado por el abuso de la privacidad, el uso de publicidad intrusiva y la sobrecarga de anuncios que provocan el rechazo en el consumidor. Además, ha puesto el acento en que esta tendencia no es algo nuevo, sino que siempre ha existido. Y es que antes de que la publicidad saltara en nuestras pantallas digitales, los anuncios ya ‘invadían’ nuestro espacio en al televisión y nuestra reacción era clara: cambiar de canal, es decir, bloquear la publicidad.
En cualquier caso, que no sea una actitud completamente nueva no hace que deje de ser preocupante para un sector que ve con temor que cada vez van a ser más los usuarios que opten por utilizar alguno de los bloqueadores que hay en el mercado, bien por las razones que la propia Chevalier ha acuñado, o bien por otras que ellos consideran justificadas
¿Qué armas tienen los anunciantes?
La pregunta, llegados a este punto, es clara: ¿Qué pueden hacer los anunciantes para luchar contra los bloqueadores? La country manager de Ligatus ha apuntado que ya han aparecido programas para bloquear los bloqueadores de publicidad. Algunos, como Secret Media específicos para contenidos de vídeo, algo muy importante si se tiene en cuentra que el 44% de la publicidad vídeo en España está bloqueada.
Al margen del uso de estos anti bloqueadores, existen otras posibles soluiones que ya se están adoptando. Una de ellas sería pagar a los propios bloqueadores, algo que Chevalier no ve nada claro: ‘¿Pagar a alguien que va contra tu negocio?’, se ha preguntado. La vía legal también es otra opción, sin embargo por ahora parece que no se ha encontrado una forma eficaz de trabajar en esta fía.
La elección de formatos menos intrusivos también se encuentra entre las posibles medidas que se pueden tomar contra el bloqueo de los anuncios. ‘Evangelizar al usuario’ sobre el impacto que tienen estos bloqueadores en el medio y en su derecho para acceder a la información también es una táctica, que ya han utilizado algunos. De hecho, en prnoticias hablábamos hace algunos días de que algunos medios de comunicación lanzan mensajes que buscan que el usuario sea consciente de cómo afecta les afecta el bloqueo y les dé su apoyo.
Otra opción, más agresiva que la ‘evangelización’, es advertir al consumidor de que si él bloquea la publicidad no recibirá información. Un ejemplo de esto, del que también hablamos hace unos días en prnoticias, es The Washington Post. El desarrollo de un nuevo modelo de negocio es otra de las alternativas.
Mientras se encuentra una solución definitiva, Chevalier ha apuntado que es necesario seguir trabajando y ha insistido en la preocupación con la que el mercado está viendo esta tendencia del incremento del uso de los bloqueadores que se han convertido en unos de los mayores enemigos de los anunciantes. Tendrán, por tanto, que seguir luchando.
