La opinión de Xavi Olba, responsable de estrategia digital de Sanofi.
Las obligaciones y los compromisos que tenemos en nuestras agentas a menudo nos impiden encontrar un hueco para hacer, al menos, 30 minutos de actividad aeróbica al día. Esta actitud sedentaria repercute negativamente en la salud de niños y adultos y explica, por ejemplo, que en los últimos años hayamos asistido a un crecimiento exponencial de los índices de obesidad. Para ayudar a frenar o incluso revertir esta tendencia cientos de compañías se han lanzado al desarrollo de aplicaciones y dispositivos wearables que repercuten positivamente en la motivación.
Durante las jornadas “Mobilízate por la Salud”, organizadas por el Secretario de Deporte de la Generalitat de Catalunya, participaron algunos de los agentes sanitarios y sociales que en los últimos años han puesto su granito de arena con el objetivo de que el máximo número de ciudadanos tenga una vida más activa. Sus excelentes iniciativas no solo han conseguido promocionar el deporte en nuestra sociedad y motivar a los ciudadanos a que lo practiquen, sino que han logrado que las personas realicen cambios de hábitos sostenibles en el tiempo.
En las jornadas contamos con la excelente presentación del profesor de la universidad de Leeds, Jim McKenna, que nos explicó que los dispositivos digitales que emplea la sociedad para la mayoría de sus actividades diarias, están siendo cada vez más utilizado como una herramienta que promueve el deporte entre sus usuarios. Así, por ejemplo, las pulseras inteligentes nos permiten monitorizar la cantidad y calidad de nuestro ejercicio; o las aplicaciones móviles, como Runkeeper o Runstatic, se convierten en nuestros entrenadores personales para que tengamos un plan de ejercicio adecuado a nuestras necesidades y nuestras agendas.
Wefitter es una plataforma creada hace dos años que permite convertir las unidades del ejercicio (kilómetros, calorías consumidas o pasos realizados) en puntos acumulables que se pueden canjear por regalos, premios directos, descuentos en productos o servicios y donarlos a causas sociales. En una entrevista emitida en Digitalmente Saludable con la colaboración de Sanofi, Roger del Sol detalla que en WeFitter se recompensa cualquier esfuerzo físico. Basta con crearse una cuenta a través de su web, sincronizar la aplicación de tracking o contador de calorías que cada cual prefiera (Runtastic, Fitbit, Endomondo, Garmin, Nike…) y empezar a mover el esqueleto.
El informático Manuel Escobar presentó su aventura con Esporti Masters, una aplicación móvil que contiene un juego de preguntas mediante el cual se adquieren los conocimientos necesarios para que el usuario se empodere y aumente su capacidad de autocuidados y su educación sanitaria. Las áreas de conocimiento sobre las que incide Esporti Masters son: Consejo antitabáquico, adherencia al tratamiento, vacunación antigripal y antineumocócica, correcto uso de la oxigenoterapia y otras terapias ventilatorias, consejos dietéticos, correcta hidratación, consumo de energía, descanso, sueño, técnicas de relajación, manejo eficaz de inhaladores, apoyo emocional y conocimiento relativos a la enfermedad (EPOC, Sd. Apnea del sueño…). Gracias a llevar una vida saludable puedes ir simulando que participas en los últimos juegos olímpicos.
Yo tuve la oportunidad de presentar dos iniciativas. Por un lado, mostré los datos que concluyen que las pulseras digitales son capaces de motivar a los pacientes con obesidad infantil. Es el proyecto “Prevengo”, realizado junto con el Hospital Sant Joan de Deu. En segundo lugar, expuse la iniciativa Diguan-millas que comenzó hace unas semanas y en la que muestro amigo Diguan se proponía un nuevo reto: dar la vuelta al mundo virtualmente con la ayuda de los kilómetros que le donasen sus seguidores. Diguan llegó esta semana a Paris donde pudo correr la media-maratón. Ahora ya se encuentra en un avión camino de Quebec para proseguir sus aventuras por el continente americano.
Durante estas jornadas, pudimos escuchar también la experiencia de varios investigadores de universidades de prestigio que están involucrados en el diseño y estudio de programas de promoción de la salud. Cristina Cimarras, investigadora de la Universidad de Zaragoza, presentó el proyecto Empresa Sana, una iniciativa que promueve el ejercicio físico entre los empleados. El proyecto piloto lo ha desarrollado en la compañía de electrodomésticos Bosch. Los empleados de la cadena de montaje que tenían problemas de cervicales o tenían un trabajo que pudiera producir problemas de espalda eran guiados por un programa de formación (videos) sobre los ejercicios que tenían que hacer para prevenir complicaciones en un futuro.
Estas excelentes iniciativas demostraron una vez más que, sin lugar a dudas, la tecnología puede ser el vehículo clave que nos permitirá estar mejor formados y motivarnos para que nuestro entrenamiento sea sostenible en el tiempo y se convierta en un hábito más de nuestras rutinas diarias.