Los intentos de los independentistas catalanes por posicionar el referéndum en la agenda mediática internacional han sido, hasta la fecha, muy discretos. Todavía se recuerda con estupor la gira que Artur Mas realizó en 2015 a Estados Unidos con escasa repercusión mediática. Sin embargo, la manifestación de este pasado domingo ha conseguido el impacto mediático que los independentistas catalanes llevaban esperando desde hace mucho tiempo. Gracias a la lectura del manifiesto que leyó el entrenador del Manchester City, Pep Guardiola, que se ha convertido en abanderado de la lucha soberanista.
Si hay un catalán independentista reconocido en medio mundo, ese es Pep Guardiola. Y este pasado domingo el entrenador del Manchester City se convirtió en la imagen del conflicto político y valedor de la demanda de un referéndum. Precisamente la imagen y escenografía del acto convocado por la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Òmnium Cultural y la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI), tuvieron un valor muy especial. Urnas, banderas catalanas con la estelada,la palabra democracia y algo que no era común hasta ahora, que fueran rostros de ciudadanos los que tomaran la palabra, y no –como viene siendo habitual- los políticos.
Quien fue el protagonista de la jornada fue el ex entrenador del Fútbol Club Barcelona y erigido símbolo de la independencia de Cataluña, Pep Guardiola. Desde las fuerzas independentistas han cambiado la forma, pero no el mensaje. Los diferentes casos de corrupción que azotan a la política catalana han dejado a muchos de sus representantes, como Puigdemont o Carme Forcadell, con su crediblidad cuestionada. Precisamente el presidente de la Generalitat ha sido el último es ser investigado por Hacienda por el presunto desvío de dinero del Ayuntamiento de Girona en la época en la que era alcalde para financiar Convergencia, filtraba este fin de semana El Español.
El degaste de la clase política catalana ha obligado a la búsqueda de nuevos actores que sean valedores del movimiento soberanista, y al mismo tiempo se conviertan en altavoces de las demandas de los independentistas para que traspasen fronteras. Quien ha dado un paso al frente ha sido el que pude ser, sin duda, el catalán independentista más famoso del mundo. El entrenador Pep Guardiola, quien este fin de semana dejaba de ser simpatizante para convertirse en el líder de un movimiento popular.
La respuesta ha sido clara. Una cobertura de prensa sin precedentes en el proceso soberanista. La imagen de Guardiola se ha convertido en portada de las secciones de internacional de media prensa europea, con especial énfasis en Reino Unido, donde reside actualmente el ex entrenador del Barça. Guardiola hizo un llamamiento para que los votantes participaran en un referéndum por la independencia programado para el 1 de octubre. “Votaremos, aunque el Estado español no lo quiera”, aseguró Guardiola a la multitud. “No hay otra manera”.
El hombre que está detrás de la estrategia de comunicación internacional de Cataluña
Un hombre es el responsable de la imagen y presencia mediática del movimiento independentista catalán en el mundo. Ése es el ex director de comunicación de Artur Mas y actual director de Comunicación y Medios Internacionales del President, Joan María Piqué. “El hombre de las gafas blancas”, como los medios de comunicación catalanes le denominaban sigue trabajando por la “República de Cataluña”, pero esta vez desde el denominado por las fuerzas independentistas como Ministerio de Asuntos Exteriores, Relaciones Institucionales y Transparencia.
La designación de Joan María Piqué como Director de Comunicación “Internacional” fue puesta en entredicho, precisamente, por su capacidad para llevar a cabo el proyecto de comunicación de Cataluña fuera de España. Fue a mediados de 2014 cuando en medio de la gira por Estados Unidos del ex Presidente, Artur Mas, se puso en entredicho el discurso independentista y su presencia en los medios de comunicación internacionales. Y es que la gira de Mas por Estados Unidos fue más bien un fracaso que un acierto, y todas las miradas se fijaron en Joan María Piqué. Esta vez –por fin–, Piqué ha conseguido que le mensaje llegue alto y claro a todo el mundo, aunque haya tenido que tirar de una celebrity como Guardiola para alzar el mensaje.
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