Tenemos sol, largos kilómetros de playas, buena comida, buena vida…y una excelente y sólida crinalidad asentada, fundamentalmente, en nuestras costas y las grandes ciudades. En las últas décadas, España atrae anualmente a más de cincuenta millones de turistas. Pero sólo desde hace ocho o diez años, entre este paquete que ata el doce ciento del Producto Interior Bruto (PIB) a la economía, se nos han camuflado las bandas crinales organizadas. Según confiesa el político Astarloa en páginas interiores, las mafias europeas tienen como destino prioritario España. Según este político, especialista en Seguridad Ciudadana, Justicia y terrorismo, del PP, una parte tante de esta responsabilidad radica en la pasividad del Gobierno socialista a la hora de reformar el Código Penal y la Ley de Enjuiciamiento Crinal.
Yendo un poco más allá de los últos cuatro años socialistas, el índice de crinalidad internacional ha ido in crescendo con la llegada masiva a nuestras fronteras de una inmigración indiscrinada. Así, la propia policía europea, Interpol, advierte de que la mayoría de los cuatro mil grupos mafiosos europeos tienen vínculos con España. Al menos 172 bandas crinales están ubicadas y son operativas en nuestro país. Todo ello con un coste penal prácticamente insignificante, a tenor de los casos de delincuentes que acumulan docenas de detenciones y delitos, y que siguen en la calle.
Lo que sorprende es la especialización del delito nacionalidades, recayendo la máxa alarma en robos ejecutados con una violencia radical. Así, los delincuentes del Este están organizados en bandas militarizadas, especializadas en asaltos de extrema violencia a chalets de lujo, como son el caso del asesinato en Pozuelo o el asalto al chalet del productor Moreno; mientras que el narcotráfico está controlado mafias marroquíes y africanas; y la prostitución mafias rusas y españolas, que ponen en circulación, según Interpol, a más de trescientas mil prostitutas, el doble de la oferta de sexo de la media de cualquier otro país europeo. Una de las pruebas de que la salud del cren florece en nuestro territorio, es el dinero negro que manejan. El Banco Europeo ha asegurado que de cada tres billetes de quinientos euros que circulan en Europa, tres de ellos los hacen en nuestro país. Señal inequívoca del dinero caliente o dinero crinal. No sólo el político Astarloa opina que habría que poner más efectivos policiales en la calle, además de recrudecer las leyes. La propia policía europea alertó a los gobiernos españoles, a éste, y también al anterior, para que tomasen en serio las amenazas. Al cren organizado le gusta España.
