La últa intervención en los medios de comunicación de Pablo Iglesias, secretario general de Podemos ha vuelto a poner en evidencia la falta de una estrategia de comunicación de la formación en referencia a las últas noticias del entorno cercano al líder de la formación.
‘Van a decir que viene el lobo, van a agitar el miedo, pero esto es una mala estrategia’ (…) ‘Frente al miedo está la sonrisa’. Estas eran algunas de las frases que Pablo Iglesias pronunciaba en su prer discurso como secretario general de Podemos hace apenas unos días. Poco después se desataba la polémica con las informaciones relativas a los conflictos internos dentro de la formación, las supuestas irregularidades en el contrato de investigación con la Universidad de Málaga; la investigación a la fundación que daba sote económico a la productora del líder de la formación; la nefasta entrevista con la periodista Ana Pastor en ‘El Objetivo’ de La Sexta; su negativa a asistir al programa de Telecinco ‘Un Tiempo Nuevo’ o las informaciones que relacionan a su pareja sentental, la líder Madrid de Izquierda Unida, Tania Sánchez, con la adjudicación de un contrato público a uno de sus hermanos.
Está claro que la maquinaria para dañar a Podemos se ha puesto en marcha desde todas las esquinas del poder y desde todas las formaciones. Sin embargo, Podemos se ha encontrado en una nueva situación para la que no estaban preparados. Si durante los dos últos años la estrategia mediática de Pablo Iglesias y su equipo ha sido la del ataque en debates políticos y tertulias televisivas, ahora son ellos, los de Podemos, los atacados. ¿La estrategia? Por el momento el silencio y en ocasiones, como la de ayer en el Parlamento Europeo, declaraciones que terminan en ataques a los periodistas.
Está claro que Podemos necesita ya, y con urgencia, que alguien comience a llevar las riendas de la comunicación del partido, una comunicación que vaya más allá del asalto a los medios de comunicación, cada vez más escéptico con las ideas de Podemos para el futuro de los medios privados.
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