Si hay algo que se ha convertido en una norma es el compartir información. Lo hacemos a través, sobre todo, de las Redes Sociales. Un hecho que, en cierta medida, ha descontrolado el proceso hasta el punto de que recomendamos a terceros prácticamente todas las noticias en base, exclusivamente, al titular. No llegamos más allá. Así, en muchas ocasiones, se hacen virales aquellas que no son ciertas (o que cuentan la verdad “a medias”). De hecho, hay muchas páginas que viven de estas mentiras. Y contra ello se quiere luchar.
La cabeza de esta batalla es la considerada como vía “promocional” por excelencia de noticias fraudulentas: Facebook. La plataforma encabezada por Mark Zuckerberg ha tenido que alzar la voz y pelear tras ser acusada de haber favorecido la elección de Donald Trump como Presidente de los Estados Unidos de América. Alegan que no ha filtrado la gran cantidad de información vertida en los muros de sus millones y millones de perfiles. La guerra parece haber comenzado. Eso sí, Facebook no va a estar sóla. Google ha tomado su mano para erradicar esta práctica (aunque de modo más laxo ya que no la sacará de las búsquedas).
¿Cómo van a sacar de circulación a las páginas repletas de mentiras? Según el New York Times, la idea es sacarlas de sus sistemas de publicidad, o lo que es lo mismo, retirarles su mayor fuente de ingresos. Google a través de su Adsense. Facebook mediante una nueva actualización de su Audience Network como bien comentan desde la compañía: “Hemos actualizado nuestra política para clarificar explícitamente que se aplica a noticias falsas”. Esto significa que ambas colocaran a los portales fraudulentos en una lista negra de “no incluir publicidad”.
Los empleados desdicen a Mark
Y mientras Facebook pelea por un lado, desde Buzzfeed aseguran que existe un grupo de trabajadores, procedentes de diversas divisiones de las empresas, que están estudiando la influencia de las noticias “falsas” en dichos comicios. Como bien argumental uno de ellos al portal: “No es una idea loca” De hecho, afirman que: “Lo que es loco es que él salga y lo deseche de esa manera, cuando él sabe, y nosotros sabemos, que las noticias falsas corrieron de forma salvaje durante la campaña en nuestra plataforma”. De hecho, como bien dicen los propios empleados, se podía haber modificado el algoritmo cuando se detectó y eso hubiese eliminado el problema. Y no se hizo. ¿Por qué no se llevó a cabo? Se dice que para que no tachasen de favoreces a los demócratas. ¿Quién tendrá razón?
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