Los periodistas latinoamericanos que realizan la cobertura de los #JuegosOlimpicosdeInvierno tienen una tarea muy complicada. Los comunicadores no solo se enfrentan a un sinnúmero de restricciones relacionadas con la pandemia. También trabajan en uno de los países menos amigables para el ejercicio del periodismo.
Antes de los iniciar los #JuegosOlimpicodeInvierno, el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ) advirtió que los móviles y los ordenadores portátiles de los reporteros podrían verse infectados con malware mientras estén en China. Además advirtieron por medio de un comunicado que: “todo lo que hagan en línea será monitoreado y estará expuesto”.
El pasado 31 de enero el Club de Corresponsales Extranjeros de China publicó un informe en el que advierte que la libertad de prensa en ese país está disminuyendo a una “velocidad vertiginosa”. Además señalaron que los reporteros extranjeros con sede en China enfrentaron agresiones físicas, piratería cibernética, denegación de visas y crecientes amenazas de acciones legales.
Hasta el momento, los periodistas extranjeros en los #JuegosOlímpicosdeInvierno no han reportado ningún inconveniente. Ello a pesar de tener una movilidad extremadamente limitada debido a las precauciones por el COVID-19.
Los periodistas en los Juegos Olímpicos de Beijing no podrán conocer mucho ese país, ya que no podrán realizar una cobertura libremente. Hasta ahora se sabe que están en un circuito cerrado, tomando solo autobuses oficiales de un lugar a otro. Esto es parte de la estrategia “COVID cero” de China, que ha intentado eliminar el COVID-19.
Un testimonio en los #JuegosOlimpicosdeInvierno
Una periodista mexicana que pidió no ser identificada, le reveló vía telefónica a PR Noticias: “es realmente complicado informar sobre lo que sucede fuera del circuito cerrado, es prácticamente imposible. Estoy utilizando redes privadas virtuales, o VPN, para intentar tener un grado de privacidad para las conexiones a Internet. Realmente no sé si esto funcione. Las cosas no están bloqueadas pero no sé que tan monitoreada estoy”.
En los últimos años, Beijing ha retrasado o rechazado la otorgamiento de visas para periodistas extranjeros. Sin embargo, muchos periodistas en los #JuegosOlimpicosdeInvierno recibieron visas a través del Comité Olímpico Internacional.
Nuestra fuente apuntó: “es difícil para nosotros los periodistas hacer nuestro trabajo acá. Nos vigilan las 24 horas, no hay libertad de acción para nosotros“.
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