La cruzada de Javier Tebas contra los medios de comunicación suma un nuevo capítulo. LaLiga ha decidido sancionar con 4.000 euros al Alavés por permitir que tres fotógrafos y un periodista tomaran imágenes de las gradas vacías de Mendizorroza durante el Alavés-Levante que se disputó el pasado lunes 11 de febrero.
Los aficionados del equipo vasco decidieron entrar cinco minutos tarde al campo como medida de protesta por los horarios impuestos por LaLiga y, durante ese espacio de tiempo, las gradas de Mendizorroza permanecieron prácticamente desiertas. Dado que la realización se esmeró para no enfocar esa zona, varios fotógrafos decidieron inmortalizar el momento, que se completó con el paseo de un féretro por todo el estadio.
Para poder tomar las instantes, los cuatro corresponsales se salieron de la zona habilitada para desarrollar su trabajo, lo cual ha motivado esta sanción al club vitoriano, tal y como indica LaLiga. Cada falta cometida tiene un coste de 1.000 euros, por lo que, al estar implicados cuatro profesionales, la sanción asciende a 4.000 euros. Por su parte, el Alavés ha decidido no asumir en solitario la sanción y cobrará 250 euros, una cuarta parte de la multa, a cada uno de los implicados.
Pese a que LaLiga se afana en remarcar que esta medida no tiene nada que ver con intentar ocultar las protestas de los aficionados al sistema de horarios impuesto, este episodio se suma a la larga lista de medidas que Javier Tebas ha puesto en marcha para coartar la libertad de información. Durante el propio Alavés-Levante, las cámaras de Gol decidieron obviar lo que estaba sucediendo en las gradas, algo que enfureció a Juanma Castaño, que llegó a afirmar que se está medida era “censura” y pretendía “cortar la libertad de expresión”.
Durante su última visita a El partidazo, el programa que conduce Castaño, Javier Tebas volvió a dar muestras de la política que quiere implantar. El directivo anunció que, en caso de que los periodistas que hacían las entrevistas una vez finalizado el partido preguntasen “algo que no está dentro del manual”, no volverían a ocupar ese puesto.
Ante esta avalancha de medidas, muchos han sido los periodistas deportivos que han alzado la voz. “Pretende que hagamos propaganda, no periodismo”, asegura Manu Sánchez, mientras que Javier Ares tilda esta situación de “indecencia”. “Qué dura va a ser la batalla de contar las cosas que pasan sin pasar por su filtro”, se lamenta Juanma Castaño.
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