La tarde de ayer el Grupo Zeta confirmaba la venta de Ediciones B a Penguin Ramdom House, por una cifra de entre 30 y 40 millones de euros. La enajenación de la filial de libros de la editora de El Periódico supone un alivio para sus cuentas, aunque esto no significa que se acaben los recortes puestos en marcha, ni que varía la renegociación ni el nuevo préstamo que se está negociando con los bancos. La hoja de ruta de la compañía sigue inalterable según han confirmado a prnoticias fuentes de Zeta.
El acuerdo fue anunciado ayer por Antonio Asensio, presidente del Grupo Zeta y Markus Dohle, CEO de Penguin Random House pocas minutos después de firmarse. Falta cerrar flecos jurídicos y administrativos por lo que se espera que en los próximos días se materialice una operación que llevaba madurando más de un año. Cuando finalice la integración formal Núria Cabutí Brull seguirá ocupando el cargo de CEO de la compañía, con el apoyo de Román de Vicente, director general de Ediciones B.
Las cifras que han trascendido y que ha podido confirmar este periódico hablan de un montante de entre 30 y 40 millones de euros, una cifra que irá parar casi íntegramente a pagar parte de los 100 millones de deuda que mantiene el Grupo. En cualquier caso esto no significa que cambie la hoja de ruta de los recortes de la compañía que en estos momentos negocia nuevos convenios colectivos a la baja en todas sus empresas con reducciones de la masa salarial que van desde el 21% como en el caso de El Periódico hasta el 40% como Tiempo o Interviú.
De hecho, las conversaciones con los sindicatos siguen su curso y en los mismos términos que hasta ahora. Del mismo modo, el dinero conseguido por la venta de la editora de libros Ediciones B tampoco modifica la renegociación de la deuda con los bancos ni la aprobación de un nuevo crédito superior a los diez millones de euros. La empresa espera poder cerrar estas negociaciones antes del verano después de que en diciembre no pudiese hacer frente al pago de unos seis millones que tocaba pagar por la “cuota” de 2016 de esta deuda de cien millones de euros.
Ediciones B es la empresa más saneada del Grupo Zeta
Estos 30 a 40 millones se destinarán a reducir la deuda, a la espera de que los bancos puedan prestar el dinero necesario para pagar el montante de la cuota de 2016. Los trabajadores creen que lel Grupo Zeta prepara un duro ERE sobre un buen número de los actuales 1.300 trabajadores y que parte del dinero conseguido dentro de los bancos será utilizado para indemnizaciones. En la empresa se niegan a hablar de ERE aunque se reconoce que sobre la mesa hay un plan de viabilidad elaborado por Deloitte precisamente para refinanciar esta deuda bancaria. En cualquier caso, dentro del Grupo Zeta se reconoce que todos los ajustes salariales propuestos no serán suficientes en un contexto de empeoramiento de la situación económica de la prensa, algo más que probable según las previsiones que se tiene en la empresa.
Ediciones B era una de las compañías más saneadas y en mejor estado de forma de todas las que componen el Grupo Zeta, condición inexcusable que puso Penguin para su compra. Pero la situación no es tan boyante en el resto de compañías que componen la almendra del grupo. El Periódico de Catalunya y de Extremadura están sufriendo los embates de una crisis endémica con fuertes caídas de la publicidad y de las ventas. Interviú y Tiempo ya no son ni la sombra de lo que fueron en el pasado, también heridas de gravedad por la crisis del papel y de las revistas. Por su parte, mantienen una unidad digital con diversos portales, que no termina de arrancar y que no aporta los ingresos necesarios para compensar el desplome del papel.
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